DOHA. La española Mireia Belmonte, quien se colgó su tercer oro, y el sudafricano Chad Le Clos, que sumó su segundo triunfo, con récord del mundo incluido, se confirmaron como los “reyes” de los Mundiales de piscina corta de Doha, en una jornada de éxito para la natación brasileña.
El conjunto sudamericano logró tres medallas de oro gracias a los triunfos de Felipe Franca en los 100 braza y las victorias de los cuartetos mixto y masculino, este último tras establecer una nueva plusmarca mundial, en las finales de 4×50 combinado.
También rebajó un tope mundial la húngara Katinka Hosszu, que se resarció de sus derrotas ante Belmonte en la jornada inaugural en los 200 mariposa y 400 estilos, con un oro en los 100 espalda, prueba en la que la magiar fijó un nuevo récord universal.
Una plusmarca con la que no pudo adornar, como hizo el miércoles, su victoria en los 800 libre Mireia Belmonte, que se impuso en la prueba larga con un tiempo de 8:03.41, cuatro segundos más que el récord del mundo que ella misma estableció en agosto de 2013.
Circunstancia que no ensombreció la victoria de Belmonte, que se impuso con absoluta claridad a la británica Jaz Carlin, plata, y a la holandesa Sharon Van Rouwendaal, bronce, a las que aventajó en casi cinco segundos.
Fue el reflejo del claro dominio de la española en una final en la que, tras tomar el mando al paso de los 300 metros, fue distanciando cada vez más a la británica, la mujer que le arrebató el oro en los 800 en los pasados Europeos de Berlín y a la holandesa.
Este viernes, Belmonte volverá a tener en Carlin y Van Rouwendaal a dos de su principales rivales en la prueba de 400 libre, en la que la nadadora española, plusmarquista mundial de la distancia, partirá como la máxima aspirante al oro.
Igualmente peleará el triunfo a Belmonte en los 400 libre la húngara Katinka Hosszu, que se resarció de las derrotas sufridas ante la española en los 200 mariposa y 400 estilos, con el triunfo en los 100 espalda, el primer oro de la “dama de hierro” en Doha.