WASHINGTON. Mientras que el Departamento de Justicia abría una investigación para determinar si se violaron los derechos civiles en la muerte por estrangulamiento de un hombre desarmado a manos de un policía en Nueva York, la fiscal que estuvo a cargo de la investigación tiene en sus manos otro asunto de alto perfil: su nominación para reemplazar a Eric Holder como Fiscal General del país.
Ambos casos han puesto a Loretta Lynch en el centro de los reflectores pocos días antes de que inicien las audiencias de confirmación en el Senado, un corto periodo de tiempo en que los nominados a estos altos cargos normalmente prefieren proyectar un perfil bajo para evitar convertirse en carne de cañón de sus críticos.
Así las cosas, Lynch va a ser inevitablemente cuestionada por la investigación que adelantó sobre la muerte de Eric Garner, que se ha constituido en una prioridad para el Departamento de Justicia que busca abordar y responder a las preocupaciones sobre el uso de la fuerza policial y los prejuicios raciales en las funciones de policía.
“De cualquier manera, este caso va a ganar notoriedad pública. Y que ella lo haya manejado le va a dar más razones a la gente para que hable de él”, dijo Joshua Levy, un abogado de Washington que fue asesor del senador demócrata por Nueva York, Charles Schumer, miembro del Comité Judicial del Senado que estudiará la nominación de Lynch. DM
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