La depreciación del tipo de cambio, que ayer se ubicó en 14.1495, un nivel que no mostraba desde el 5 de junio de 2012, podría tener algún impacto en la inflación. De acuerdo con Marco Oviedo, economista en jefe de Barclays México, la depreciación del tipo de cambio prende los focos amarillos debido a que contagia los precios de los productos y mercancías.
“El reto para el Banco de México (Banxico) es que la depreciación de la moneda no generé más inflación en los siguientes años, ya se han hecho estudios sobre el impacto que tiene una depreciación en los precios”, mencionó el economista.
“El hecho de que el tipo de cambio esté en 14 pesos por dólar es una señal que prende un foco amarrillo, pero refleja aún la solidez de la economía mexicana”, manifestó.
“Hasta ahorita no hay evidencia de que sea un impacto muy fuerte, pero 10% de la depreciación como la que estamos viviendo se va a reflejar en 0.2% de incremento de la inflación”, señaló el analista.
“Si la inflación iba a ser de 3%, esta depreciación la empuja a 3.2%”, advirtió.
El peso cerró ayer jueves la sesión con una depreciación de 0.38% o 5.5 centavos, al cotizar en alrededor de 14.15 pesos por dólar.
La divisa se colocó como la segunda divisa con mayores pérdidas entre los principales cruces, superado sólo por el real brasileño que registró una caída de 1.45%, agregó Gabriela Siller, directora de análisis económico y financiero Banco BASE.
Marco Oviedo dijo que México sigue siendo el país favorito de los inversionistas y empresarios de los mercados emergentes, a pesar de los vaivenes y de hechos como la desaparición de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, Guerrero.
“Ante los avances en la agenda de cambio estructural y la solidez macro, los trágicos eventos y noticias recientes, por todos conocidos, y que han generado una gran indignación entre la sociedad, nos han recordado la enorme importancia de lograr un avance integral, que no puede limitarse exclusivamente a la transformación económica”, dijo Ernesto Torres Cantú, director General de Grupo Financiero Banamex.
Actualmente, el tipo de cambio cotiza en niveles que no habíamos visto desde 2012, pero aun así hay un peor desempeño de otras monedas como el yen japonés, el real brasileño, el euro, precisó Oviedo.
“El peso mexicano se ha comportado de una manera estable y si no fuera por el tema de las reformas estructurales aprobadas en el Congreso de la Unión, los fundamentales macroeconómicos sólidos y por ser la economía más cercana a Estados Unidos; el peso debería estar en 16 o 17 unidades”, acotó.
La caída del peso es un tema que le preocupa mucho a la Junta de Gobierno del Banco de México, pero también el descenso del precio petrolero.
“El mercado petrolero estuvo en bonanza por mucho tiempo y había una fuerte demanda principalmente de países emergentes y eso generó que se vieran precios entre 100 y 120 dólares el barril”.
Recordó que por un largo tiempo el precio del barril de petróleo de exportación serán bajos, debido a la mayor oferta por el boom energético en Estados Unidos y la desaceleración de la economía de los mercados emergentes, como China, y otras naciones como Japón y Europa están a punto de caer en un estancamiento.