La predicción del científico británico, Stephen Hawking, sobre que la inteligencia artificial podría amenazar a la humanidad, vuelve abrir el debate sobre la tecnología y el futuro del ser humano.
El también astrofísico y cosmólogo de 72 años habló de sus temores sobre el desarrollo de IA. “Una versión mejorada de IA podría rediseñarse a sí misma por cuenta propia e incluso llegar a un nivel superior. Los seres humanos, que están limitados por la evolución biológica lenta, no podían competir, y serían reemplazadas”.
Temores de Hawking divide a expertos
Un número creciente de expertos en el tema, concuerda que eventualmente los seres humanos crearán sistemas tan lúcidos y autónomos, que pensarán más allá de nuestras propias capacidades.
Jean-Gabriel Ganascia, filósofo y experto en inteligencia artificial, juzgó de “excesivo” el “grito de alarma” de Hawking.
“El peligro es sobre todo el humano que utilizaría estas tecnologías para someter” a otros seres humanos, consideró este profesor la universidad Pierre et Marie Curie de París.
En tanto, Nick Bostrom, futurólogo de la universidad de Oxford, piensa que “la máquina inteligente logrará sobrepasar la inteligencia biológica. Entonces, habrán riesgos existenciales asociados a esta transición”.
Sin embargo, para Anthony Cohn, profesor de la universidad de Leeds (centro de Reino Unido), se está “aún lejos” de la inteligencia artificial general “completa”, que preocupa a Stephen Hawking. “Se necesitarán aún varias décadas”, precisó.
¿Qué le espera a la humanidad con la inteligencia artificial?
De acuerdo a la revista de ciencia Cómo ves, se han hecho cuantiosas predicciones de lo que la aplicación de las técnicas de inteligencia artificial traería en el futuro.
Sobre las computadoras personales, la velocidad de un procesador será enorme y no podremos agotar su memoria ni cargando ciclos enteros de cine ruso, que podremos ver doblados al español con una voz idéntica a la de los actores. Serán gobernadas con la voz: “Actívate”. Quizá ya no sean necesarios los monitores; unos anteojos inalámbricos de realidad virtual nos mostrarán cómo va quedando nuestro texto.
La red Internet, que llegará a nuestra casa a través del cableado óptico, transportará inmensas cantidades de información que serán cargadas en nuestra computadora en décimas de segundo.
Los robots comenzarán a desplazar al personal que nos atiende en diversos lugares. Una máquina podría cambiar un cheque y resolver las dudas sobre un estado de cuenta.
Se prevé que la economía cambie, quedarán en el pasado los tipos de traje peleándose a gritos en las casas de bolsa. Las computadoras, conectadas en red a los indicadores bursátiles de todo el mundo, moverán los capitales de un lugar a otro, sin que sea necesaria la voluntad humana.
Pronto tendremos edificios inteligentes. Es decir, construcciones que hacen uso de toda clase de tecnologías para hacer más eficiente su uso y control. Abarcando principalmente cuatro categorías: seguridad, comunicaciones, apoyo logístico y automatización de procesos.
En cuanto a una guerra global, los pilotos controlarían por realidad virtual pequeños y mortíferos aviones, helicópteros y tanques a cientos de kilómetros del campo de batalla sin arriesgar nada.
Es muy probable que en pocos años, robots cirujanos realicen complejas intervenciones utilizando el instrumental quirúrgico con la precisión de una impresora.
Las máquinas ¿pueden pensar?
La respuesta es no. Expertos han logrado dotar a las máquinas de información útil que pueden usar en un ámbito especializado. Pero el pensamiento humano es otra cosa. El cerebro posee aproximadamente 10 mil millones de neuronas, y si aún no se sabe con exatitud cómo se interrelacionan para pensar, este proceso no se podrá reproducir en una máquina.
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