PRISTINA, Kosovo. Legisladores del Parlamento de Kosovo aprobaron este martes una nueva coalición de gobierno, que incluye a un primer primer ministro que no ha estado involucrado con insurgentes que combatieron por independizarse de Serbia.

 

El 8 de junio se realizó una elección general en Kosovo, pero riñas entre adversarios políticos evitaron la conformación de un nuevo gobierno, hasta la votación de este martes con 65% de aprobación.

 

Isa Mustafa, presidente de la Liga Democrática de Kosovo, fue nombrado primer ministro.

 

El gobierno incluirá al exprimer ministro Hashim Thaci, del Partido Democrático de Kosovo, quien ostentará un doble cargo como viceprimer ministro y ministro de Relaciones Exteriores.

 

“Me gustaría manifestar nuestra buena disposición a trabajar juntos con todas las partes, en beneficio de los ciudadanos de Kosovo”, dijo Mustafa, minutos después de la votación.

 

Thaci encabezó a los combatientes en la exitosa guerra separatista de Kosovo contra Serbia, ocurrida de 1998 a 1999. Kosovo se volvió independiente en 2008, y Thaci y sus aliados fueron acusados de utilizar violencia e intimidación para controlar los primeros gobiernos de Kosovo.

 

Se espera que el nuevo gobierno continúe conversaciones con Serbia, monitoreadas por la Unión Europea (UE), una condición impuesta a ambas naciones para que puedan acercarse a una eventual integración al bloque.

 

La minoría serbia de Kosovo respaldó al nuevo gobierno, y aceptó tres ministerios y tiene un viceprimer ministro.

 

El nuevo gabinete tendrá que asegurarse de que el Parlamento apruebe una iniciativa de ley para crear una corte especial, financiada y operada por la UE, para juzgar a ex comandantes de la etnia albana, sospechosos de manejar una banda de trata de personas y de matar civiles serbios detenidos durante la guerra de Kosovo.

 

El gobierno de Mustafa enfrentará alto desempleo y un alza en el descontento social alimentado por una ausencia de inversionistas extranjeros, algunos de los cuales afirman que funcionarios de Kosovo quieren sobornos para permitir que compañías extranjeras hagan negocios en el joven país.