Tras varias horas de no haber llegado a un acuerdo, la Cumbre del Clima de Lima inició su sesión de trabajo para poder aprobar un resolutivo que sirva de acuerdo final sobre la lucha contra el cambio climático, que deberá aprobarse el próximo año en París para sustituir al protocolo de Kioto a partir de 2020.
De acuerdo con información de la agencia AP, el ministro de Perú, Manuel Pulgar Vidal alrededor de las 3:00 am del sábado inició a toda prisa una reunión informal con los pocos delegados que aún esperaban en una sala de plenarias y anunció que inmediatamente después convocaría una sesión formal para aprobar el paquete.
Pulgar Vidal había anunciado el viernes por la tarde que él y los ministros de Noruega y Singapur iban a dialogar con las delegaciones que se resistían a aprobar en Lima los detalles para la implementación de sus responsabilidades, dándose un plazo de dos horas para lograrlo.
Los delegados que asisten a una reunión mundial sobre calentamiento global se opusieron el sábado de madrugada a un intento de Perú, como país anfitrión del encuentro, de aprobar sin mayor debate un acuerdo sobre implementación de responsabilidades en la lucha contra el cambio climático.
El acuerdo preliminar, logrado luego de intensas negociaciones alentadas por el ministro peruano removía uno de los principales obstáculos que amenazaban con hacer fracasar la reunión de Lima.
El paquete se refiere a la implementación de los acuerdos de Durban de 2011, conocidos como ADP, y que recogen la respuesta de la comunidad internacional al cambio climático.
La llamada COP20 (la vigésima conferencia de los firmantes del convenio de cambio climático de Naciones Unidas) cumplió el viernes el último día de su calendario oficial, pero a la hora de la clausura no solo no había acuerdo sino que en su lugar una larga lista de oradores esperaba su turno.
Los detalles de la reunión informal trascendieron a los reporteros cuando el audio y la imagen de lo que sucedía llegó a la sala de prensa durante un corto espacio de tiempo.
Pulgar Vidal pidió disculpas por la demora y explicó sus planes. Cuba pidió una revisión del paquete y recibió apoyo de otras delegaciones. En ese momento se cortaron tanto el audio como la imagen para que los delegados continuaran informalmente sus deliberaciones, prácticamente en secreto.
El pacto de París debe facilitar acciones en el mundo para que la temperatura global no se incremente en más de 2 grados centígrados (3,6 Fahrenheit) hacia 2050. Los países deben adecuarse y empezar a actuar en 2020.
(Con información de AP)
MG