A lo largo de la historia, la industria automotriz ha sido una gran influencia en los demás sectores, principalmente los procesos de fabricación han sido copiados para hacer más eficiente la producción.
LA REVOLUCIÓN DEL AUTOMÓVIL
Uno de los ejemplos más claros es la cadena de ensamble móvil inventado por Henry Ford hace 101 años, la cual logró revolucionar la industria durante las próximas décadas.
Esta innovación simplificó el ensamble de 3,000 piezas del Ford Model T al dividir la producción en 84 etapas, mientras una cuerda jalaba el chasis del vehículo los trabajadores iban ensamblando los diferentes componentes del vehículo. Gracias a este nuevo proceso de producción se redujo el tiempo de montaje de doce horas a aproximadamente 90 minutos.
Pero además de reducir el tiempo de manufactura este sistema de producción permitió reducir costos y por consiguiente el Ford Model T redujo su precio de 850 a 300 dólares.
Esto permitió que la industria del automóvil diera un giro radical, y es que ya no solamente la gente adinerada tiene acceso a un vehículo motorizado, sino que también las personas de clase media ya podían tener su propio auto. Después de décadas el Model T se mantiene como uno de los vehículos más vendidos del mundo al registrar más de 15 millones de unidades.
LA ERA DE LOS ROBOTS
Con el paso del tiempo este sistema de producción en línea se ha mantenido solamente que las manos del hombre han sido sustituidas por máquinas. Tras haber conquistado la industria automotriz, los nuevos robots industriales están por capturar otros sectores industriales que, a la fecha, han permanecido subdesarrollados.
Países en los que la aplicación de la robótica está más avanzada, como Japón, Alemania y Estados Unidos, la densidad de robots en el sector automotriz es siete veces mayor que en todas las otras áreas industriales.
FUSIÓN HOMBRE-MÁQUINA
Una muestra de cómo la automatización robotizada continua progresando son las cifras. Entre 2010 y 2013 las inversiones en tecnología robótica el sector automotor a nivel mundial crecieron un 22 % por año.
Un importante factor de impulso es la nueva generación de robots menos complejos que permiten que el hombre y la máquina trabajen juntos de manera estrecha, sin protección de seguridad entre ellos. Indiscutiblemente esta fusión de hombre- máquina tendrá un papel esencial en la promoción de las visiones de producción inteligentes.
En este punto, los robots de fácil utilización están abriendo oportunidades de automatización en distintos sectores. El potencial futuro de estos robots destaca al comparar la densidad robótica en varios sectores. Por ejemplo, la industria automotriz en Japón es la que más destaca a nivel mundial. Tiene un récord de 1,520 robots industriales por cada 10,000 empleados.
Esto quiere decir que existe una máquina automatizada por cada seis trabajadores. La cantidad equivalente en las demás industrias es de sólo 214 unidades.
Sin duda lo más impresionante de todo esto es que apenas es el principio de una nueva era de producción, si ahora estamos impresionados por los robots que el mismo hombre ha creado no queremos pensar como será la tecnología de las fábricas en un par décadas.