NACIONES UNIDAS. El secretario general de Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon, expresó que ningún agravio justifica el horror de atacar una escuela, luego del atentado que causó hoy la muerte de al menos 135 niños en un colegio en Pakistán.

 

En una sesión en el Consejo de Seguridad, Ban indicó que “ninguna causa puede justificar esta brutalidad. Ningún agravio puede excusar tal horror. Es un acto de horror y vil cobardía atacar a niños indefensos mientras aprenden”.

 

Apuntó que los corazones del mundo entero se solidarizan con los padres y familias que han perdido a seres queridos en el ataque a la escuela en la ciudad paquistaní de Peshawar, y condenó el “atroz acto” en los términos más enérgicos.

 

“Las escuelas deben ser espacios seguros de aprendizaje. Tener una educación es un derecho de todos los niños, ir a la escuela no debe ser un acto de valentía”, explicó el titular de la ONU.

 

Asentó además que la ONU continuará con los esfuerzos conjuntos con las autoridades de Pakistán a fin de combatir el terrorismo y el extremismo, y urgió al gobierno para hacer todo lo posible para llevar a los responsables del ataque de hoy ante la justicia.

 

De acuerdo con informes del gobierno de Pakistán, un grupo de militantes del Talibán es el responsable de haber perpetrado el ataque, el más sangriento cometido ahora por esta agrupación terrorista en ese país asiático.

 

Mientras tanto, el director del Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF), Anthony Lake, afirmó que el crimen contra los niños paquistaníes debe hacer más que sacudir la consciencia del mundo, y que debe alentar a la sociedad a apoyar los esfuerzos de los padres de Pakistán por educar a sus hijos.

 

Por su parte, la representante especial de la ONU para los niños y conflictos armados, Leila Zerrougui, dijo que atacar a niños no sólo es un crimen atroz sino que no tiene sentido y es intolerable.

 

“El Talibán en Pakistán, que se adjudicó el ataque de hoy, continúa demostrando que no tiene respeto por los derechos humanos. Los responsables deben ser llamados a cuentas”, enfatizó Zerrougui. DE