Funcionarios de los bancos privados y de la llamada “banca del subdesarrollo” (Nafinsa, Bancomext, Banobras et al), reconocen que uno de los principales objetivos de la reforma financiera aprobada el año pasado que era “prestar más y más barato” ha resultado una farsa.
Esa bonita frase de “transformar a la banca y al crédito en palancas de desarrollo de hogares y empresas para lograr un mayor crecimiento económico, empleo y competitividad…” ha servido nada más para lucirse en el discurso político. Por su parte, los bancos de fomento del gobierno presumen que han otorgado más crédito que nunca, pero a la hora de revisar sus numeritos resulta que a quienes les prestan son a proveedores del gobierno, y nada barato.
Uno de los argumentos del Ejecutivo cuando presentó la reforma financiera fue que el desempeño de la “banca del subdesarrollo” había sido demasiado conservador, por lo que la reforma buscaba relanzar a esas instituciones para convertirlas en una fuente de acceso al crédito y a los servicios financieros, que proporcionara asistencia técnica y capacitación para impulsar el desarrollo económico.
También se buscaba, decían, consolidarla como un motor para el crecimiento incluyente, complementando y fomentando el financiamiento privado a través de una mayor flexibilidad regulatoria y financiera en beneficio de las familias mexicanas. Ah, e impulsar activamente la inclusión financiera, estableciendo la obligación en ley de adoptar una perspectiva de género. Concluían que para lograr un desarrollo incluyente en beneficio de las familias mexicanas, es necesario que en México se preste más y más barato. Demagogia pura, pues. Hoy, todas esas cosas se han cumplido a medias, reconocen funcionarios de los bancos.
El único que se ha creído el “cuento” de que la “banca del subdesarrollo” presta más y más barato es el director del Banco Nacional de Comercio Exterior, quien diariamente emite boletines de prensa para presumir de los logros alcanzados. ¿Creerá Enrique de La Madrid que con esa estrategia el titular de Hacienda lo va a nombrar secretario de Agricultura? ¡Y por qué el titular de Hacienda!, exclaman los bisoños. Pues porque es quien decide esas cosas importantes en Sagarpa. ¿Pues qué no era Marcos Bucio?, apuntan los malosos.
AGENDA PREVIA
¿Quiénes aconsejaron al presidente del Tribunal Electoral José Alejandro Luna Ramos a que renunciara a ese alto puesto?, preguntan los curiosos. Pues tal vez su hermana, la ministra Margarita Luna Ramos, piensan quienes señalaban que el presidente del mencionado tribunal era un obstáculo en la loca carrera por la presidencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación de la señora. Dicen los que saben que ni renunciando toda la parentela que los hermanitos tienen en la Corte y en el Tribunal Electoral, la ministra Luna Ramos alcanzará la silla. Vamos a ver.
Y hablando de mujeres y traiciones, Ady García López pretende ser candidata a diputada federal en Tabasco… pero no por el PRD ni por el PAN, a quienes sirvió durante la “docena trágica” (2000-2012), sino por el PRI. Y parece estar dispuesta a todo, incluso a enfrentarse a su ex jefe y amigo Roberto Madrazo y a Manuel Andrade. Al primero lo acusa de quererle arrebatar, “one more time”, la candidatura. Al segundo le reclama su falta de apoyo. Ady, a través de algunos “cuadernos”, les ha respondido a ambos que ella cuenta con el apoyo del “chino”. ¿De Zhenli Ye Gon?, preguntan los bisoños. No hombre, del otro.
Al rendir su segundo informe de actividades legislativas, el diputado David López Cárdenas destacó la aprobación unánime de 800 iniciativas de ley que significan el 92% del total, así como el respaldo de la Legislatura estatal a las reformas estructurales impulsadas por el presidente Enrique Peña Nieto.
(Por vacaciones a los lectores, esta columna reanudará su publicación el próximo 5 de enero. ¡Felices fiestas decembrinas!)