Un artefacto explosivo colocado en una motocicleta estalló hoy fuera de una tienda comercial en la ciudad de Quetta, suroeste de Pakistán, dejando un saldo preliminar de cuatro muertos y cerca de 30 heridos, informaron fuentes policiales.
La explosión, que se llevó a cabo por control remoto, también dejó otras tiendas, edificios y vehículos dañados, según la policía, citada por la cadena de televisión paquistaní Geo TV.
Un oficial de los escuadrones de desactivación de bombas estimó que entre cuatro y cinco kilogramos de explosivos fueron utilizados.
El estallido tuvo lugar fuera de una tienda en Prince Road, uno de los centros comerciales más concurridos de Quetta, capital de la conflictiva provincia de Baluchistán, ubicada cerca de la frontera de Afganistán.
Ningún grupo se ha atribuido la responsabilidad del ataque, pero la policía culpa a los militantes talibanes o algunos grupos insurgentes baluchis, que han llevado a cabo acciones similares en el pasado.
En los últimos meses, los insurgentes han destruido decenas de gasoductos y torres de energía en diferentes partes de Baluchistán.
Este atentado se produce a poco más de una semana de que miembros del grupo Tehreek-e-Taliban Pakistan (TTP), vestidos de militares, irrumpieron en una escuela en la ciudad de Peshawar, matando a 148 personas e hiriendo a 131, la mayoría niños.
AH