Los alumnos de la Escuela Superior de Ingeniería y Arquitectura (ESIA), unidad Zacatenco, del Instituto Politécnico Nacional (IPN) iniciaron las las movilizaciones estudiantiles cuando tomaron las instalaciones de su escuela el pasado 17 de septiembre para protestar por los cambios en los planes de estudio para las nuevas generaciones.
A partir de la protesta de los ingenieros civiles, comenzaron a movilizarse los estudiantes politécnicos: primero por los cambios en los planes de estudio, después por el nuevo reglamento interno aprobado por el Consejo Técnico y por la destitución de la entonces directora Yoloxóchitl Bustamante Díez.
Inicia paro general
El 30 de septiembre, ese día amaneció con la noticia de que 31 de las 44 escuelas del IPN se sumaron al paro indefinido, ante la exigencia de derogación del nuevo reglamento interno. Una una se iban sumando hasta que al final quedaron 43 de las 44 que tiene el instituto, en suspensión de labores.
Una comisión de estudiantes pactó con la Secretaría de Gobernación (Segob) una reunión con su titular Miguel Ángel Osorio Chong, a fin de que intercediera en busca de destrabar el conflicto estudiantil.
Realizan megamarcha
Ese mismo día salieron a las calles más de 60 mil politécnicos. Ataviados con instrumentos correspondientes a sus carreras y utilizando el emblema clásico de cualquier estudiante, sus mochilas, marcharon desde el Casco de Santo Tomás a la calle de Bucareli, donde está la Secretaría de Gobernación.
En la que fue conocida como la “marcha de las credenciales”, los jóvenes iban por la calle recogiendo basura, en columnas ordenadas para no permitir el paso de infiltrados ni porros, mostrando sus identificaciones a cualquiera que pusiera en duda que este se trataba de un movimiento estudiantil y no de personas ajenas a la institución como se cansó de repetir la entonces directora.
Los manifestantes pidieron que Osorio Chong recibiera el documento directamente en el templete instalado afuera de las instalaciones de la Segob, en la avenida Bucareli, frente a todos los alumnos del IPN, pues señalaron que la reunión con autoridades debe ser pública y no con una comisión especial de estudiantes.
Osorio Chong recibe pliego petitorio
Ese día, los estudiantes del IPN protagonizaron un hecho inédito, el secretario de Gobernación salió a de las instalaciones de la dependencia para recibir el pliego petitorio de los politécnicos.
Por primera vez un titular de la Segob aceptó salir a las calle a recibir en personas un pliego petitorio.
Osorio Chong subió al templete y tomó el micrófono para leer el pliego petitorio de los alumnos con 10 demandas contra el nuevo reglamento de la institución y los planes de estudio de educación media superior.
En sus primeras palabras, reconoció plenamente al movimiento estudiantil del IPN, y señaló que conoce cada una de las demandas de los jóvenes.
“Toda la apertura para encontrar solución”, señaló y propuso que la solución fuera inmediata. “Queremos atender de inmediato las causas por las que están aquí”, agregó.
Los estudiantes le dieron tiempo para pensarlo y que ofreciera una respuesta formal a sus demandas, una respuesta en papel membretado que resolviera de manera verdadera los problemas históricos del Politécnico: porrismo, falta de presupuesto, corrupción.
Inclusive la respuesta del gobierno federal, todo, sería consultado con las bases en un esquema de asambleísmo que exigía la participación de todos los estudiantes: las decisiones se tomaban en conjunto en las escuelas y de ahí pasaban a la Asamblea General Politécnica, la representación estudiantil conformada por con dos jóvenes de cada escuela y dos oyentes sin derecho a voto.
Renuncia Yoloxóchitl Bustamante
Fuel el 3 de octubre, cuando Miguel Ángel Osorio Chong confirmó la renuncia de Yoloxóchitl Bustamante como directora del Instituto Politécnico Nacional (IPN) y la cancelación de los planes de estudio yreglamento interno que los estudiantes solicitaron en su pliego petitorio de 10 puntos.
Osorio Chong hizo entrega del documento de respuesta del gobierno federal al pliego petitorio y destacó: “El gobierno mantendrá siempre un diálogo abierto con ustedes, estudiantes del IPN”.
Agregó que se entrega el documento firmado para que consten por escrito las respuestas a su pliego petitorio y ante el cuestionamiento de que por esta respuesta busque obtener un reconocimiento precisó: “No venimos por ningún reconocimiento, efectivamente, es nuestra obligación y así lo estamos haciendo”.
Conminaron al gobierno federal a una negociación entre pares: el mismo número de representantes de cada lado, y con condicionantes: los funcionarios se tendrían que enfrentar en un debate con la comunidad politécnica y para ello, aceptarían celebrarlo en el auditorio Alejo Peralta (mejor conocido como “el queso”, el magno edificio donde toca la Orquesta Filarmónica del Politécnico) y transmitir las discusiones completas, sin editar, por el canal televisivo del Poli, el canal Once para que todo el que quisiera pudiera escucharlo.
Inician mesas de diálogo
Finalmente, el 4 de noviembre, se llevó a cabo la primera mesa de diálogo entre la Secretaría de Educación Pública (SEP) y los estudiantes de la Asamblea General Politécnica (AGP), la cual concluyó sin acuerdos.
Cada parte redactó una propuesta y la dejó para que su contraparte la analice.
Los estudiantes del Instituto Politécnico Nacional reiteraron su solicitud de que en la próxima sesión el gobierno federal presenten al director interino designado por el presidente Enrique Peña Nieto.
Enrique Fernández nuevo director
El 20 de noviembre, el presidente Enrique Peña Nieto designó a Enrique Fernández Fassnacht, como nuevo director general del Instituto Politécnico Nacional (IPN).
Ese día, los estudiantes del IPN marcharon del Momento de la Revolución hacia la Secretaría de Educación Pública para protestar por la designación de Enrique Fernández Fassnancht como su nuevo director.
Durante las mesas de diálogo los alumnos del IPN se pronunciaron por los desaparecidos de los normalistas de Ayotzinapa, por los detenidos de las marchas del 20 de noviembre y el 1 de diciembre: su movimiento no podía permanecer ajeno a la realidad del país, como exigían los representantes del gobierno.
Ante las presiones por reabrir las instalaciones, Zamantha López, alumna de la Unidad Profesional Interdisciplinaria de Biotecnología (Upibi) y una de las principales negociadoras de la mesa de diálogo, invitaba a sus compañeros a mantenerse firmes en la lucha. El paro terminaría más rápido si los estudiantes actuaban en unidad.
Firman acuerdos
Y lo consiguieron el pasado 9 de diciembre, con la firma de ocho acuerdos, un director nuevo y un compromiso de celebrar el Congreso Nacional Politécnico, la discusión que habrá de determinar la refundación del Instituto, sus nuevos principios que permitan la inclusión de más sectores (como alumnos, profesores, egresados e investigadores, por ejemplo) en la toma de decisiones, la elección democrática de un director que represente a la comunidad en vez de ser designado por el presidente.
Como parte de lo firmado, las autoridades federales informaron que los acuerdos serán publicados en el Diario Oficial de la Federación, en la página de la Secretaría de Gobernación y la Secretaría de Hacienda.
El notario 190 David F. Dávila, fue quien dio fe de la firma entre las autoridades federales y los alumnos.
Por los politécnicos firmaron un vocero de cada una de las 44 escuelas del IPN y los representantes de la AGP ante la mesa de diálogo.
Por parte del gobierno, suscribieron el subsecretario de Educación Superior, Fernando Serrano Migallón; Alejandro Ozuna Rivero, de la Secretaría de Gobernación, y Ángel Mejía, de la SHCP.
Alumnos entregan planteles
Después de 74 días después de ese 30 de septiembre, los jóvenes entregaron las instalaciones limpias, ordenadas e íntegras.
El pasado 15 de diciembre, regresaron a clases los primeros 12 mil estudiantes del Instituto Politécnico Nacional, de las áreas médico-biológicas, quienes tendrán que recuperar tres semestres en el periodo de un año.
Las cosas comienzan a volver a la normalidad, cuando menos para los siete mil estudiantes de licenciatura y posgrado de la Escuela Superior de Medicina (unidad Santo Tomás); los dos mil 170 del Centro de Investigación en Ciencias de la Salud (CICS), unidad Milpa Alta; y dos mil 788 de la Escuela Nacional de Medicina y Homeopatía, cerca de Zacatenco.
GH