NUEVA YORK. Varios de los más destacados organismos no gubernamentales (ONG) en el mundo repudiaron hoy el ataque al semanario francés Charlie Hebdo, que causó la muerte de al menos 12 personas, y lo calificaron como un grave asalto a la libertad de prensa.
“Este es un oscuro día para la libertad de expresión y para una vibrante cultura de prensa. Pero por sobre todo, es una atroz tragedia humana”, dijo Stephan Oberreit, director del grupo Amnistía Internacional en Francia.
Oberreit apuntó que la táctica, que busca suprimir la libertad de expresión y cultivar el terror, debe ser condenada sin reservas y pidió a las autoridades francesas hacer todo lo posible para llevar a los responsables ante la justicia.
Por su parte, Human Rights Watch afirmó que “nada puede justiciar un ataque así y aquellos que lo organizaron y llevaron cabo deben ser llevados ante la justicia. Francia debe proteger la libertad de expresión y protegerla de cualquier venganza de grupos particulares”.
Grupos de defensa de la libertad de prensa y de los periodistas expresaron también su repudio al atentado contra las oficinas de la revista, ubicadas en París, y que se ha caracterizado por la publicación de satíricas tiras cómicas, incluidas parodias del profeta Mahoma.
Christophe Deloire, secretario general de Reporteros sin Fronteras, expresó que el ataque es similar a lo que sucede en zonas de guerra o que padecen una grave inestabilidad, como Irak, Somalia o Pakistán.
“¿Podemos esperar tal horror en Francia? Una pesadilla se ha convertido en realidad. Los ataques terroristas marcan un día negro en la historia de Francia”, aseveró Deloire.
Mientras tanto, el Comité para la Protección de Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) consideró que el asalto es una desafiante agresión a la libertad de expresión sucedido justamente en el corazón de Europa.
“La escala y la violencia (del ataque) es aterradora. Los periodistas debemos ahora permanecer unidos y mandar el mensaje de que esos intentos asesinos para acallarnos no prosperarán”, enfatizó Robert Mahoney, subdirector del CPJ.
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