WASHINGTON. Estados Unidos aplaudió hoy la decisión del gobierno de Cuba de completar la liberación de 53 prisioneros políticos cubanos, en el marco de las conversaciones con Washington en busca de normalizar las relaciones bilaterales.
“Damos la bienvenida a este muy positivo suceso y estamos complacidos que el gobierno cubano haya cumplido con su compromiso”, señaló la portavoz del Departamento de Estado, Marie Harf.
Durante las pláticas, Cuba aceptó excarcelar al espía cubano al servicio de Estados Unidos, identificado en reportes como Rolando Sarraff Trujillo, mientras que Washington liberó a los espías cubanos Gerardo Hernández, Ramón Labañino y Antonio Guerrero.
Por separado, Cuba decidió liberar por “razones humanitarias” al contratista estadunidense Alan Gross, condenado en Cuba a 15 años de prisión por cargos de espionaje, así como a los 53 prisioneros políticos.
Harf sostuvo que los 53 cubanos fueron descritos por organizaciones de derechos humanos como individuos que sólo fueron hechos prisioneros por haber ejercido derechos internacionalmente reconocidos o por haber promovido reformas políticas o sociales en la isla.
“Durante nuestras conversaciones con los cubanos, compartimos los nombres de individuos encarcelados en Cuba por cargos relacionados con sus actividades políticas”, señaló la vocera diplomática.
“El gobierno cubano tomó la decisión soberana de liberar a estos individuos, como lo indicó Raúl Castro en su discurso del 17 de diciembre”, añadió.
Un grupo de los primeros liberados, bajo la fórmula de libertad condicional, son miembros de la ilegal y opositora Unión Patriótica de Cuba (Unpacu) y estaban en prisión desde 2012.
Todos fueron condenados a penas de hasta cinco años de prisión acusados de “desacato, resistencia y desordenes públicos”, excepto el activista Enrique Figuerola, quien fue condenado bajo el cargo de “atentado”.
GH