CALIFORNIA. Los Globos de Oro han inaugurado 2015 premiando a los mejores actores, películas y series, aunque otra oficiosa competición, la de los “mejor y peor” vestidos, centró la atención en esta 72 edición, que dejó como tendencia el escote en “v” y algún que otro desliz estético.
Lupita Nyong’o, quien eligió un modelo de Giambattista Valli alta costura para acudir a la gala la encumbró al olimpo de las más elegantes, donde compartió trono con otras afroditas del buen gusto como Jessica Chastain, la actriz pelirroja de “The Help” sorprendió con un Versace cobre con escote en “v” y fruncido en la cintura.
Naomi Watts resplandeció de principio a fin con un Gucci amarillo limón que combinó a la perfección con un collar Bulgari con forma de serpiente.
Otras celebridades que se unieron a la lista son Kate Beckinsale al portar un Elie Saab en gris neutro con un particular brillo plateado, Allison Williams con un espectacular vestido Armani Privé en rojo y un Reese Whiterspoon en un vestido strapless Calvin Klein metálico que también se robó la noche.
Bromas, política y alguna sorpresa
Fue una noche de escotes de vértigo, colas de vestido arañando sensualmente la alfombra roja, algunas sorpresas en la concesión de premios, como el galardón a la mejor película de comedia para “El gran hotel de Budapest” (se esperaba que fuese “Birdman”) y sátiras a Corea del Norte, además de condenas, por parte de muchos actores, al reciente atentado en Francia contra la sede de Charlie Hebdo.
Algunos supieron estar a la altura, como Dakota Johnson, quien estrenará en febrero “Cincuenta sombras de Grey” junto al modelo Jamie Dorman. La hija de Melanie Griffith eligió un Chanel en dos tonos plata con falda de “paillettes” (brillo) y escote palabra de honor, escogido también por Zosia Mamet o Reese Witherspoon.
La temperatura subió de la mano de Sienna Miller, Kate Hudson o Sofía Vergara, quien acudió a la “post fiesta” con un diseño muy ceñido al cuerpo y Louise Roe, todas con escote en “v” casi hasta el ombligo. Como contrapunto, Julianne Moore demostró que enseñar más no siempre es mejor, y recogió el premio a la mejor actriz dramática por “Siempre Alice” con un Givenchy plateado con plumas en la falda.
El estilo de las veteranas
Las más maduras de la gala, “una de las más flojas” de los últimos años según varios medios, dieron una lección de elegancia demostrando que la edad solo es un número. Jane Fonda, Helen Mirren y Jessica Lange presumieron de cuerpo y de espíritu joven en esta edición.
Las princesas de cuento no faltaron en los premios concedidos por la HFPA (Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood); algunas actrices se convirtieron en sirenas y cenicientas con diseños palabra de honor más clásicos o de estilo “lady”. Fueron los casos de Anna Kendrick, la cenicienta de “Intro the woods”, Salma Hayek o las poco supersticiosas Naomi Watts y Leslie Mann, de amarillo.
Jennifer López volvió a acaparar todos los “flashes” con un modelo plateado de Zuhair Murad que dejaba ver sus esbeltas piernas gracias a una abertura en la parte delantera de la falda. La cantante no fue la única a la que habría que haberle cantado aquello de “por la raja de tu falda”, ya que otras “celebrities”, como Cindy Crawford y Katie Cassidy, lucieron cuerpo con sendas aberturas.
Con pantalones y a lo loco
Aunque el vestido volvió a ser la prenda protagonista de la noche, Emma Stone demostró que se puede triunfar en pantalones y se atrevió con un diseño de Lanvin con top de brillo y pantalón negro resaltado con un lazo que hizo las veces de cinturón.
Pero no todo fue glamur en el hotel Beverly Hilton de Beverly Hills; hubo quien intentó destacar tanto con el atuendo que acabó ganándose las críticas más negativas (y vengativas) en internet, como Keira Knightley, quien apostó por un Chanel estampado con pájaros y mariposas, Lana del Rey o Laura Prepon, tan gótica y recargada como su personaje en “The Orange is the new black”.
Conchita Wurst se estrenó en Hollywood con un modelo de terciopelo verde que dejaba al descubierto un “bustier” clásico, toda una transgresión que no le ha valido muy buenas críticas, al menos desde el punto de vista estilístico.
Con información de EFE