NACIONES UNIDAS. Quedan al menos 50 puntos calientes de ébola en los tres países del África Occidental más afectados por la pandemia, pero los casos nuevos están disminuyendo y la letal enfermedad será derrotada, dijo el jueves el responsable de lucha contra el ébola en Naciones Unidas.
El último informe de la Organización Mundial de la Salud que muestra una reducción de los casos en Guinea, Liberia y Sierra Leona “son muy buenas noticias”, dijo el doctor David Nabarro en una entrevista con la Associated Press.
La OMS indicó que en la semana que termina el 11 de enero, Guinea registró su número más bajo de casos totales de ébola por semana desde mediados de agosto.
Liberia tuvo su total más pequeño desde la primera semana de junio y no confirmó casos nuevos hasta los últimos dos días de la semana. Y los nuevos casos en Sierra Leona bajaron por segunda semana a su punto más bajo desde el final de agosto.
Sin embargo, Nabarro advirtió de que “aún hay cifras de casos nuevos que son alarmantes, y hay puntos calientes que están apareciendo en lugares que me hacen pensar que aún hay bastante de la enfermedad que no estamos viendo”.
Hay “al menos 50 micro brotes” activos, y las cadenas de transmisión del virus “aún están por comprender”, dijo.
El actual brote de ébola ha sido el peor en la historia mundial. Según el último informe de la OMS publicado el miércoles, ha sumado más de 21 mil casos y ocho mil 300 muertes.
La cifra de muertos en Liberia hasta el pasado domingo era de tres mil 538, seguida por las tres mil 062 muertes en Sierra Leona y las mil 814 de Guinea.
La clave, dijo Nabarro, es conseguir que las comunidades locales cambien sus rituales tradicionales de curación y funerales, así como prácticas de enterramiento que implican mucho contacto con fluidos corporales que contagian el ébola.
En algunos casos, las pruebas sugieren que hasta 50 personas se infectaron en un solo funeral, dijo.
Nabarro explicó que la campaña nacional e internacional por unas prácticas seguras de sanación y enterramiento, aislamiento de los posibles casos y tratamiento rápido para las víctimas de ébola está funcionando.
Pero pidió más respaldo internacional, incluyendo “detectives de virus” que puedan identificar dónde hay casos, “antropólogos que puedan contarnos cómo reaccionan las comunidades”, y gestores que se aseguren de que los centros de tratamiento están bien equipados.
“Vimos un gran cambio de comportamiento en Liberia en noviembre y diciembre”, dijo. “Ahora estamos viendo un gran cambio en comportamientos en buena parte de Sierra Leona, aunque aún hay una o dos comunidades reacias a cambiar el comportamiento. Y estamos empezando a ver también un gran cambio en comportamientos en Guinea”.
Sin embargo, no se cumplió el objetivo de aislar y atender al 100% de los pacientes y realizar el 100% de los sepelios con seguridad para el 1 de enero. Eso es “un indicio de la tarea aún por realizar”, dijo el responsable.
“Por supuesto, el 100% de los entierros seguros y el 100% de la gente bajo tratamiento con rapidez siguen siendo los objetivos a los que aspiramos”, dijo Nabarro. “Y de verdad espero que en buena parte de la región, estemos ahí en un futuro muy cercano, y por eso el número de casos está bajando y seguirá bajando, y antes de que pase mucho tiempo veremos el fin de este brote”.
El presidente de Sierra Leona, Ernest Bai Koroma, predijo esta semana que su país estaría libre de ébola, según los estándares de la OMS, para mayo. Eso implica una ausencia de nuevos casos durante un periodo de tiempo.
Nabarro dijo que la estimación de Koroma “se basa en la forma en la que las comunidades locales están abrazando la respuesta”.
“Personalmente respetaría su opinión y su predicción”, añadió Nabarro, que acaba de regresar de una visita de 10 días al África occidental que incluyó los tres países más afectados. “Yo soy muy reacio a hacer predicciones, porque simplemente no tengo la información”.
MG