Tamaulipas es uno de los estados con alto potencial energético en México, aunque para atraer capital privado deberá resolver los problemas de inseguridad en sus ciudades fronterizas y puertos, consideró José Ángel García Elizondo, presidente nacional de la Organización Nacional de Expendedores de Petróleo (Onexpo).
En su opinión, los problemas de falta de seguridad en algunas zonas de desarrollo y con potencial energético en México podrían retrasar los beneficios de la reforma energética, como la atracción de capital privado.
México comparte una gran región petrolífera con Estados Unidos en el Golfo de México. Actualmente la zona de Estados Unidos cuenta con provedurías importantes en Texas y Louisiana. Con la reforma energética podría detonarse la inversión en la costa del Golfo, no sólo en materia petrolera, sino en otros giros de negocio que den abasto a esta actividad.
“Pero si no se resuelve el problema de inseguridad, si no damos certidumbre y hacemos que todo fluya, en Estados Unidos seguirán siendo los que provean a las plataformas; podríamos experimentar una situación de rezago y eso es lo que no podemos permitir”, dijo García Elizondo.
El presidente de la organización más importante de gasolineros del país indicó que ya trabajan con el gobierno federal para reducir problemas como las tomas clandestinas y la venta ilegal de combustible, sin embargó señaló que el año pasado aumentó el número de secuestros en Tamaulipas, su estado natal.
García Elizondo mencionó que esta entidad enfrenta otros problemas de graves de inseguridad como tráfico de armas y narcotráfico, en particular en las zonas fronterizas de Nuevo Laredo, Reynosa y Matamoros, así como en los puertos de Altamira y Tampico.
En cuanto a los recientes desabastos de combustible, atribuyó el problema a dos factores: el crimen organizado que opera las tomas clandestinas, y la escasa infraestructura de ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex).
En México hay 77 terminales de abastecimiento, almacenamiento y distribución de combustible, de las que 45 son abastecidas por ductos, 21 por pipas y 11 vía marítima, es decir, un sólo sistema de ductos abastece 60% de las terminales.
Opinó que con la reforma energética se logrará una red de ductos que permita el abastecimiento más eficiente de gasolina. En la actualidad, “cada vez que se detecta una toma clandestina se detiene el ducto y se deja de bombear todo el producto, se repara y después de varias horas se vuelve a bombear y eso descuadra el inventario”, y a diario se reporta por lo menos una fuente de robo de combustible.
En cuanto a los bajos precios del insumo, García Elizondo precisó que esta condición es temporal, ya que el petróleo es un recurso natural no renovable e históricamente su precio tiende al alza.