NUEVA YORK. Para que los Halcones Marinos sean el primer equipo que gana títulos consecutivos del Super Bowl en la última década, tendrán que vencer a los Patriotas, justo los últimos que consiguieron esa proeza de la mano de la misma dupla ganadora que sigue tirando de ellos.
En un duelo entre los campeones defensores y la franquicia dominante de la década de 2000, Seattle (14-4) se medirá a Nueva Inglaterra (14-4) dentro de dos semanas, en Glendale, Arizona.
Los Patriotas, campeones de la Conferencia Americana y comandados por el quarterback Tom Brady, llegaron a su octavo Super Bowl, igualando a Dallas y Pittsburgh, con el mayor número de participaciones en la historia de la liga.
Es la sexta vez que Brady y el entrenador Bill Belichick avanzan al súper domingo en los últimos 14 años. Ganaron los trofeos tras las campañas de 2001, 2003 y 2004. Pero cayeron en sus últimas dos apariciones, tras las temporadas de 2007 y 2011. En ambas ocasiones, sus verdugos fueron Eli Manning y los Gigantes de Nueva York.
Seattle, con su mariscal de campo Russell Wilson, buscará refrendar su título luego de sobrevivir a un encuentro en el que pareció segura la eliminación. Tras remontar, los Halcones Marinos dieron cuenta de los Empacadores de Green Bay en tiempo extra.
Seattle parece tener el empaque propio de una dinastía, gracias a Wilson, al esquinero Richard Sherman y a una defensa que ha permitido el menor total de puntos y yardas durante dos temporadas consecutivas. Sólo los Osos habían igualado ese logro a la defensiva, en 1985-86.
Seattle permitió apenas 15.9 puntos y 267 yardas por juego. Ante el juego terrestre fue el tercer equipo más efectivo cediendo apenas 81 yardas y tampoco fueron muy prolijos permitiendo yardas por pase con apenas 185.6 de promedio, los mejores en la liga.
Pero no todo es miel sobre hojuelas para Seattle. ¿Acaso Sherman está bien tras lastimarse el codo izquierdo el domingo? En cada uno de los dos partidos de playoffs, logró una intercepción.
Y después, ¿cómo intentará la defensiva de Seattle frenar a Brady? Deberá también ingeniárselas para contener a Rob Gronkowski y al resto del ataque de Nueva Inglaterra, que es sumamente versátil.
¿Wilson y sus receptores podrán mejorar tras ser prácticamente anulados el domingo? Se medirán a Belichick, un entrenador que cuida mucho la defensiva. También tendrán frente a sí a Darrelle Revis, otro esquinero de elite.
Mucho se habla de que Seattle llegó a esta postemporada con seis triunfos en fila. Hay que remontarse once años para encontrar a un equipo que los supere y ese fue, sí, adivinó usted, el equipo de Nueva Inglaterra con ¡12!
Por eso las casas de apuestas conceden apenas 2.5 puntos de ventaja a los Halcones Marinos, conscientes de que puede ser uno de los Super Bowl más cerrados de la historia.