La Organización Internacional del Trabajo (OIT) advirtió que América Latina, y en especial los países exportadores de petróleo –entre ellos México, Venezuela, Colombia y Argentina– se encuentran en peligro de revertir los avances laborales y económicos alcanzados en la última década por el desplome de los precios del crudo, la exportación de materias primas y una baja productividad.
Aunque el desempleo en América Latina pasó de 9.1% en 2003 a 6.3% en 2013, esta mejoría comienza a desvanecerse debido a que en 2014 el desempleo subió 0.3 puntos porcentuales, el primer aumento desde 2009.
La OIT tiene previsto que el desempleo regional suba a 6.8% en 2015, y a 6.9% en 2016, un punto porcentual arriba del promedio global, lo cual empata con un mal desempeño económico de América Latina.
“Después del repunte en la región tras la crisis, cuando el crecimiento alcanzó 6% en 2010, este ritmo ha disminuido (…) Para 2014 y 2015, el crecimiento del PIB de la región será menor que el de las economías avanzadas por primera vez desde 2002”, precisó el informe Perspectivas Sociales y del Empleo en el Mundo 2015 de la OIT.
En México, pese a que el desempleo mostrará una disminución en los próximos años al pasar de 4.9% en 2014 a 4.3% en 2017, de acuerdo con la prevision de la OIT, la economía mexicana ha sido incapaz de recuperar el nivel previo a la crisis económica, cuando registró una desocupación de 3.4% en 2007.
El gobierno mexicano estima que la economía creció más de 2.1% en 2014, después del pobre 1.3% de un año interior. Ambos datos son significativamente inferiores al 4% registrado en 2011 y 2012.
La organización apuntó que por primera vez en varios años América Latina presentará un panorama económico por debajo del promedio global, con un crecimiento menor a 2%. La OIT señaló como los principales factores la baja global en la demanda de materias primas y menores precios del petróleo.
“Es muy probable que México mantenga un nivel de crecimiento muy similar a América Latina en los próximos años”, dijo en entrevista Manuel Valencia, director del programa de Negocios Internacionales del ITESM Campus Santa Fe.
La OIT señaló que el declive económico de América Latina también está ligado a un bajo crecimiento de la productividad, lo cual ha sido persistente desde la década pasada, “al crecer 1.5% entre 2003 y 2012, contra 2% a nivel global”.
Asimismo, la desigualdad en América Latina, la cual había disminuido entre 2002 y 2012 al bajar 5 puntos en el índice Gini, gracias a una reducción de la brecha entre trabajadores con mayor y menor educación, detuvo su tendencia a la baja desde hace dos años.
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