jk5Su nombre no es quizá muy conocido, pero su presencia física y su calidad actoral sí, siempre interpretando a personajes intensos y más allá de lo convencional. Es recordado por su trabajo en series como La Ley y el Orden y Oz, además de haber dado vida a J. Jonah Jameson en la trilogía de Spider-Man dirigida por Sam Raimi.

Actualmente, Jonathan Kimble “J.K.” Simmons vive el mejor momento de su carrera gracias a la película Whiplash: Música y Obsesión, dirigida por Damien Chazelle y que hoy llega a la cartelera nacional con cinco nominaciones al Oscar, entre ellas la de Mejor Película y Mejor Actor de Reparto, categoría en la que el veterano actor originario de Detroit obtuvo el Globo de Oro gracias a su interpretación del sádico y maquiavélico profesor de música Terence Fletcher.

La historia está basada en un cortometraje de 18 minutos del mismo título que presentó su director en el Festival de Sundance en 2013 y que fue aclamado tanto por público como por la crítica, ganando el Premio de la Audiencia y el del Gran Jurado, y en el que Simmons dio vida al mismo personaje que ahora lo tiene como el gran favorito para ganar el Oscar. Durante la presentación del filme en Los Ángeles, Simmons compartió su experiencia en el mismo:

jk2¿Crees que los artistas necesitan el tipo de presión que Fletcher exige en el filme?

Espero que no, o serían masoquistas. Estoy completamente de acuerdo en la necesidad y los beneficios que implican ser exigido y dirigido en un proyecto que necesita colaboración, pero el tipo de manipulación y abuso que él le da a su alumno no tiene cabida en el mundo.

¿Basaste tu interpretación en alguien en particular?

Al menos no de manera consciente. Leí el guión y todo estaba ahí, en el papel. Sentí que lo comprendí de inmediato y que podía ser capaz de ser esa persona. Cuando comenzamos a filmar, Miles (Teller, el protagonista) y yo entramos en un gran ritmo, que el director captó perfectamente en la cámara.

jkEl filme habla de cómo sobrevivir a un trato que te ayuda a trascender hacia un nivel personal y artístico más elevado…

Sí, y es que yo sabía lo que Damien tenía en mente desde el principio. Esa fue una de las primeras cosas que platicamos cuando nos conocimos por primera vez, que debía tener esta ambigüedad. La idea siempre ha sido la de inspirar discusión y debate, no saber si al final de la película estás contento por los logros de Andrew (Teller) o lamentar su pérdida de humanidad. Y creo que lo logramos.

Muchos bateristas aseguran que hay maestros peores que el que representas en pantalla…

Ese es justo el debate, y me encanta que la película lo esté propiciando. ¿Hasta dónde es demasiado lejos?, ¿hasta dónde es demasiado?, ¿vale la pena? Yo he hecho esa comparación jk4antes. Este tipo de abuso puede ser necesario y apropiado si estás entrenando para entrar en un grupo de élite del ejército, pero no sé si sea apropiado para una escuela de música. Pero ahí está y puede llegar a ser productivo.

¿Es la improvisación más importante que la precisión en ciertos niveles?

A nivel actoral es divertido, pues aunque te tienes que preparar, no siempre tienes el tiempo que quisieras para ello. Pero si las palabras correctas están en el guión, el resto viene de pasar un buen rato con él, absorbiendo lo que el personaje trae y no sólo aprendiéndote tus diálogos. En este caso, con un director joven, fue de gran ayuda que no entrara en esa batalla de egos y decir: “Oh, espera, no pusiste una coma en esa frase” o “dijiste ‘quizá’ en lugar de ‘tal vez’”. Tener la libertad de poder improvisar, sobre todo en un filme que no tiene muchos días para ser rodado, es un regalo para los actores.

Título original: Whiplash

Director: Damien Chazelle

Elenco: Miles Teller, J.K. Simmons, Paul Reiser, Melissa Benoist

Duración: 106 minutos

Whiplash