El Ejército Mexicano ha sido blanco desde hace meses de señalamientos que lo vinculan con la desaparición de personas en el país, entre ellos los 43 normalistas de Ayotzinapa, pero esta es una problemática de la que los militares tampoco están exentos y que de hecho, va en considerable aumento.

 

Datos oficiales de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) revelan que de enero a noviembre de 2014 fueron dados de baja por distintos motivos un total de 7 mil 999 militares, entre ellos se ubicaban 130 casos de soldados que literalmente desaparecieron durante el servicio.

 

Comparado con 2013, cuando el registro fue de 67 militares desaparecidos, se trata de un incremento de 94% en un año. Y si se compara con 2012 en que hubo 15 soldados desaparecidos, el alza se dispara hasta el 766%.

 

En total, desde que la Sedena comenzó a incluir en el 2010 la causal de “desaparición” en su registro de personal dado de baja, suman 242 los militares reportados bajo esta condición.

 

Fuentes federales indicaron que al igual que ocurre con los casos de la Base Nacional de Personas Desaparecidas, no hay claridad respecto a qué pudo pasarle a los soldados registrados bajo esta condición y tampoco se conoce la causa de la misma. Es decir, puede tratarse de militares secuestrados o asesinados de los que no hay restos, o de casos donde simplemente se fueron voluntariamente sin dejar rastro.

 

La única claridad en torno a los soldados desaparecidos es que de forma repentina se dejó de conocer su paradero. Al momento en que esto ocurrió todos eran elementos en activo y aparentemente sin ningún problema.

 

Cabe señalar que no hay ningún mando de jerarquía entre los militares desaparecidos. De todos ellos, según los datos oficiales de la Sedena, tres eran tenientes, ocho sargentos segundos, 29 cabos, y los 202 restantes soldados rasos.

 

Tampoco existe información respecto a los estados en que han ocurrido estas desapariciones. El despliegue de las fuerzas castrenses es prácticamente de alcance nacional.

 

El crecimiento de las desapariciones en el Ejército evidencia una tendencia que también se registra en las desapariciones en general en el país, aunque no con la misma magnitud. Entre los años 2010 a 2014 (cifras a octubre de este último año) el número de desaparecidos creció más de 81% en México.

 

Casi 18 mil soldados fuera con EPN

 

El registro oficial de la Sedena indicó que durante los años 2013 y 2014, primeros del actual sexenio, un total de 17 mil 971 militares causaron baja de las filas del Ejército Mexicano por distintos motivos.

 

De ese total, destaca el caso de 3 mil 54 soldados que decidieron desertar de las filas castrenses, es decir, abandonaron los cuarteles y misiones voluntariamente y sin autorización de los mandos. También el caso de 319 que fueron inhabilitados por “mala conducta”, y de 378 a los que les fue rescindido el contrato. Otros 370 militares causaron baja por defunción.

 

Cabe señalar que el promedio anual del personal castrense dado de baja ha caído en los últimos años casi de forma sostenida, si se toma en cuenta que en 2006 salieron 26 mil militares, en el 2008 sumaron 17 mil 364, en el 2010 fueron 12 mil 441, y en el 2012 el número fue de 9 mil 82 soldados que salieron del Ejército.