WASHINGTON. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, condenó el «brutal asesinato» del ciudadano japonés Haruna Yukawa por el grupo yihadista Estado Islámico (EI) y pidió la libertad para su compañero de cautiverio, Kenji Goto.

 

El mandatario extendió sus condolencias y apoyo a Japón en un comunicado difundido por la Casa Blanca, en el que demandó además la liberación del resto de rehenes que el EI mantiene bajo su poder.

 

«Estamos hombro con hombro con nuestro aliado Japón y aplaudimos su compromiso con la paz y el desarrollo en una región lejos de sus costas», dijo Obama.

 

«Continuaremos trabajando juntos para llevar a los responsables de estos asesinatos a la Justicia y continuaremos tomando acciones decisivas» para acabar con el Estado Islámico, subrayó el mandatario.

 

El EI difundió un video con una imagen fija de Goto que muestra una fotografía de Yukawa supuestamente decapitado, acompañado de un audio en el que afirma que su compañero de cautiverio ha sido ejecutado por los yihadistas.

 

Los yihadistas dieron un plazo de 72 horas al Gobierno de Japón para pagar 200 millones de dólares y evitar la ejecución de los dos rehenes, en un video publicado en internet el pasado martes.

 

En la nueva grabación, Goto subraya que ya no es necesario el abono de dicho rescate para salvar su vida, porque ahora lo que el EI pide es la excarcelación de una extremista detenida en Jordania, identificada como Sayida al Rishawi.

 

Desde el pasado agosto, el EI ha decapitado a los periodistas estadounidenses Jim Foley y Steven Sotloff, a los cooperantes británicos David Haines y Alan Henning y al estadounidense Peter Kassig, y amenaza con matar a otros occidentales.

MG