CARACAS. Cientos de opositores marcharon el sábado de manera pacífica en Caracas y otras ciudades en protesta por la inflación desbordada, la escasez y la recesión que han sumido al país sudamericano en una crisis profunda que amenaza con agravarse por la caída de los precios petroleros.
Entre algunas ollas vacías y carteles con que denunciaban la falta de alimentos básicos, cientos de opositores recorrieron algunas vías del este de la capital venezolana y realizaron una concentración en el sector de Chacaíto.
“Hay que salir… No hay comida en los mercados, en supermercados. Lo poco que llega la gente lo puede comprar sólo después de horas y horas de cola”, dijo molesta Sandra Leal, una profesora universitaria de 46 años, mientras levantaba con su mano derecha una olla vacía. “La crisis es tan grande y el gobierno no implementa medidas sensatas y lógicas. Yo no sé para dónde vamos”.
El líder opositor y ex candidato presidencial Henrique Capriles desestimó la escasa asistencia de manifestantes a la concentración.
“Aquí no vinimos a medir convocatoria, porque si queremos medir convocatoria la vamos a medir, que va a llegar, en las urnas de votación”, declaró Capriles a The Associated Press.
Capriles cuestionó que el gobierno haya enviado el sábado cientos de policías y guardias nacionales con equipos antimotines y tanquetas a varios puntos de la ciudad para impedir que los manifestantes pudieran avanzar hacia el municipio capitalino del Libertador, donde el alcalde oficialista Jorge Rodríguez prohibió el paso de la marcha.
“Lo que no hay es escasez en este país es de culillo (miedo) del gobierno”, agregó el dirigente.
Al final de la marcha se registró una pequeña escaramuza entre un grupo de manifestantes y policías nacionales. En el incidente dos personas sufrieron lesiones leves por contusiones, confirmó el alcalde del municipio capitalino de Chacao, Ramón Muchacho, en su cuenta de Twitter.
Opositores también realizaron marchas pacíficas en las ciudades de Valencia, Maracaibo y San Cristóbal.
Por su parte, Maduro enfiló el sábado nuevamente sus críticas a sus opositores, a quienes acusó de estar en la calle “buscando disturbios, violencia… desestabilización”, y promoviendo una “guerra económica”.
Aunque caiga el precio del petróleo “la revolución social va a seguir”, agregó el mandatario durante una visita a un mercado callejero instalado por el gobierno en una de las principales avenidas del centro de la capital.
En medio del malestar generado por la crisis económica, el oficialismo realizó el viernes en Caracas una marcha multitudinaria para conmemorar el aniversario de la instauración de la democracia en el país.
Venezuela enfrenta una crisis económica con una inflación que el año pasado sobrepasó el 64%, la mayor tasa de la región, problemas severos de escasez y una recesión económica de 2,8%.
MG