Siempre se ha escuchado que el alcohol afecta de manera diferente en vuelo que en tierra. Según estudios el consumo de una copa de alcohol en vuelo, equivale a tres copas en tierra.
Esto debido a las condiciones atmosféricas especiales que tienen lugar a bordo de un avión.
Los cambios de presión del aire, cansancio del vuelo y, especialmente, la deshidratación causan que el alcohol sea más potente que lo usual, ya que al haber menos agua y oxígeno en la sangre la concentración de alcohol será más alta, conduciendo a una rápida intoxicación.
El problema no es sólo el que puede causar una borrachera, sino que tiene otros efectos asociados que ponen en peligro la salud.
Entre los más peligrosos, se encuentra el ser una de las causas que provocan el “Síndrome de la clase turista” o Trombosis venosa profunda.
El estado de embriaguez en vuelo se divide en tres niveles distintos, aquí te decimos como identificar el estado de afectación de un pasajero ebrio:
Primer nivel
Descrito como: “con una copa de más”. El pasajero está eufórico, alegre, sonrojado, huele a alcohol, tiene los ojos brillantes, un poco de inestabilidad, … Cuando alguien se encuentra en este nivel de embriaguez lo mejor es no darle más alcohol.
Segundo nivel
Descrito como “borrachera moderada”. La persona tiene problemas de equilibrio, se vuelve irritable, agresivo, grosero, tiene sed, puede tener náuseas y vómitos. En este caso, no darle alcohol, no darle de comer y darle un estimulante, como café concentrado con mucho azúcar o refresco de cola ayudaría.
Tercer nivel
Descrito como: “borrachera severa”. No se tiene en pie, delira, tiene la piel blanca y fría, respira cada vez más despacio. Este estado es el más peligroso, lo ideal es no permitir que ningún compañero de viaje llegue a estos niveles ya que las consecuencias pueden ser tan severas como la muerte.
Así que ya lo saben la próxima vez que piensen en beber de más en un vuelo, seguramente no la pasaran bien.