PHOENIX, Arizona. El running back de los Seahwks de Seattle Marshawn Lynch repitió constantemente la frase “estoy aquí para no ser multado” durante cinco minutos antes de abandonar el podio durante el día de prensa previo al Súper Bowl.
Cerca de 200 periodistas se arremolinaron alrededor del podio donde estaba Lynch desde unos 15 minutos antes de que el jugador llegara pero éste se negó a responder a pregunta alguna.
Lynch echó a andar el cronómetro de su teléfono, tomó una caja de dulces Skittles que le lanzaron y se detuvo a levantar la grabadora de un reportero antes de alejarse.
OBO