El valor de las exportaciones petroleras sufrieron una dramática caída anual en diciembre pasado de 43.7%, informó el Inegi. La venta de crudo al exterior alcanzó los 2 mil 467 millones de dólares, contra 4 mil 392 mdd obtenidos en el último mes de 2013.
Ésta fue la caída más severa de 2014, y fue la séptima consecutiva desde julio, luego de que el precio del crudo a nivel mundial comenzó a desplomarse a mediados del año pasado. La mezcla mexicana de exportación se ubicó ayer en 38.59 dólares por barril, una pérdida de 62% con respecto a su máximo alcanzado en 2014 de 102.41 dólares por tonel.
De esta forma, el superávit de productos petroleros pasó de 8 mil 625 millones de dólares en 2013, a mil 490 millones de dólares en 2014, una reducción de 83%.
“Es posible que este gobierno no alcance a ver los frutos de su propia reforma energética. Las primeras licitaciones para a la iniciativa privada fueron publicadas este año, por lo que su efecto se empezará a sentir hasta 2016, y posterior a ese año se empezarán a evaluar sus beneficios”, dijo en entrevista, Manuel Valencia, director académico del programa de Negocios Internacionales del ITESM Santa Fe.
A la reducción en el comercio exterior de petróleo en el país se sumó una caída de 24.5% en las exportaciones extractivas -como la minería- y una baja de 3.7% en productos agropecuarios, una situación consistente con la caída en los precios a nivel mundial de materias primas, lo que ha generado un estancamiento económico en América Latina por la baja demanda en Asia y la Unión Europea.
En el caso del cobre -principal producto de la minera Grupo México- se encuentra en los 2.5 dólares por libra, su nivel más bajo en más de cinco años, mientras que la plata -México es el principal exportador- se encuentra en un nivel cercano al registrado durante la crisis financiera de 2008.
La caída en la venta de petróleo y materias primas propició una disminución sustancial de 84.4% en el saldo de la balanza comercial -diferencia entre exportaciones e importaciones-, el cual reportó un superávit de 254 millones de dólares. Las exportaciones totales sumaron 34 mil 115 mdd, contra 33 mil 861 mdd de las importaciones.
Este superávit fue alcanzado gracias a la actual fortaleza de la industria manufacturera que creció casi 16% en diciembre pasado -el mayor registrado en el año-, alcanzando los 30 mil 173 mdd, lo cual representó 88% de las exportaciones totales. Además, esta industria mostró una tendencia constante de crecimiento en 2014, tanto en las manufacturas automotrices como en otros productos.
Pero estos números no lograrán absorber la caída en el sector petrolero, minero y agropecuario, debido a que las empresas de manufacturas en México no han aprovechado todo su potencial de crecimiento, dijo Manuel Valencia.
“Tenemos que acostumbrarnos a ver estos números, y reconsiderar nuestra posición como un gran país exportador, debido a que las petroleras siguen teniendo un gran peso en la economía mexicana. Todavía hay un gran camino por recorrer para consolidarnos como un país exportador de manufacturas y bienes industriales”.
El académico indicó que en el futuro aun con una recuperación en el precio del petróleo, la estrategia de México deberá diversificarse en la producción de bienes industriales y manufacturas, con el objeto que la baja en la venta de crudo comience a tener menos repercusiones en la economía mexicana.
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