El parte médico de la enfermera Juana Zacarías Pérez y del policía Liborio Vélez Morán, internados en el Instituto Nacional de Rehabilitación (INR), es de pronóstico reservado, confirmó el director quirúrgico, Juan Antonio Marín Aveitia.
Entrevistado luego de la visita del presidente Enrique Peña Nieto al nosocomio, explicó que los dos heridos más graves a consecuencia de la explosión en el Hospital Materno Infantil de Cuajimalpa reciben atención en el área de Terapia Intensiva y se encuentran sedados.
La enfermera Zacarías Pérez, supervisora de Enfermería del tercer turno en el Hospital de Cuajimalpa, está “muy grave”, ya que presenta quemaduras en 70 por ciento de la superficie corporal y traumatismo craneoencefálico.
Mientras el policía Vélez Morán presenta quemaduras en brazos, manos y frente, además de traumatismo craneoencefálico. En ambos casos, el pronóstico es reservado.
El doctor Marín Aveitia descartó la necesidad de trasladarlos a cualquier hospital del extranjero, dado que la Unidad de Quemados del INR cuenta con la tecnología y el personal necesarios para la mejor atención médicamente posible.
En ambos casos se trata de quemaduras de tercer grado y en consecuencia es difícil saber cuándo pudieran salir del estado de gravedad ambos pacientes.
No obstante, dado el cuadro clínico, confió en que el policía Liborio Vélez pudiera salir de ese estado en dos o tres semanas, mientras que Juana Zacarías, necesitará más tiempo, por la extensión y la situación de las lesiones.
Mientras tanto, en entrevista fuera del instituto, Luis Ángel Reyes, esposo de Juana Zacarías, confirmó que los médicos le han informado que su cónyuge está muy grave y el pronóstico es reservado.
Lamentó que luego de la emergencia él y sus tres hijos tuvieron que visitar varios hospitales para saber a dónde la habían trasladado, antes de llegar al Instituto Nacional de Rehabilitación, a cuyo personal e instalaciones calificó como “de primera”.
Explicó que su esposa tenía más de 20 años trabajando en el Hospital Materno Infantil de Cuajimalpa, siempre en el área de enfermería y en el accidente perdió a una de sus compañeras enfermeras.
DEC