Dos procesos estancados por inconsistencias en las acusaciones, enfermedades que se han agravado en prisión y la posibilidad de que sea recluida en su domicilio al haber cumplido 70 años de edad, son parte del expediente Elba Esther Gordillo a casi dos años de su detención.
La ex lideresa del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), detenida el 26 de febrero de 2013, fue recluida en primera instancia en el Penal Femenil de Santa Martha Acatitla, pero tras detectarle enfermedades crónicas fue trasladada a la Torre Médica de Tepepan, el 4 de marzo de ese mismo año.
Gordillo Morales, que estuvo al frente del SNTE por 24 años, enfrenta dos acusaciones, una por uso de recursos de procedencia ilícita y delincuencia organizada y otro por defraudación fiscal.
Su defensa ha presentado diversos amparos en contra del auto de formal prisión ordenados por el juez Sexto y 14 de Procesos Penales Federales por su presunta responsabilidad en los delitos antes mencionados, para ambos juicios se ha ordenado la reposición del procedimiento tras lo cual se dictó de nueva cuenta la formal prisión.
Actualmente los procesos están en curso en la etapa de presentación y desahogo de pruebas, pero una de las circunstancias que ha frenado el avance es el hecho de que los testigos que han sido llamados a declarar no asisten o se reservan, ya que tienen la calidad de protegidos.
Tal es el caso de Erick Salvador Rodríguez García, quien se desempeñaba como contador del SNTE; Nora Guadalupe Ugarte Meneses, señalada como colaboradora cercana de Gordillo, quien debe declarar a través de videoconferencia el próximo 25 de febrero.
Mientras tanto, el líder del sindicato Juan Díaz de la Torre, también ha evitado comparecer alegando que se encuentra en diligencias del magisterio.
¿A su casa?
El pasado 6 de febrero la llamada Maestra cumplió 70 años de edad, lo que le permite solicitar la prisión domiciliaria, de acuerdo con el artículo 55 del Código Penal Federal y otras normas contempladas en los tratados internacionales a los que México está suscrito.
Fuentes judiciales informaron que la edad no es una situación determinante para que la procesada pueda ser excarcelada, pues depende de otro tipo de valoraciones judiciales, como el grado de peligrosidad y la adaptación que haya demostrado durante su tiempo en reclusión, e inclusive de podría someter a valoración pericial los dictámenes médicos.
Gordillo Morales sufre de hipertensión con riesgo de infarto, hepatitis tipo C, hernias en la columna, una fractura degenerativa en el tobillo, aneurismas, y por esta última requiere una intervención quirúrgica en un hospital de especialidades.
De acuerdo con su abogado, Marco Antonio del Toro, las enfermedades de Gordillo Morales se han agravado durante su reclusión en un cuarto de hospital donde no entra el sol y se encuentra expuesta a diversos contagios por las enfermedades que atienden en el referido nosocomio ubicado en el penal de Tepepan.
Inclusive, el litigante consideró que sería menos perjudicial para ella estar entre la población general, pues podría convivir con otras personas, tendría espacio en el patio común donde podría pasearse, tomar el sol por la mañanas, aunque con eso, no la sanaría de los males que la aquejan.
Ahora, la posibilidad más cercana para que Gordillo Morales regrese a su hogar, aunque sea en arresto, es a través del incidente de prisión preventiva domiciliaria y de atención preferente para la salud del adulto mayor, el cual quedará a criterio de los respectivos jueces que llevan sus procesos si le otorgan el beneficio, aunque este tiene que ser unánime, de lo contrario no procederá.
Los casos
Cabe destacar que personajes polémicos han solicitado el arresto domiciliario para enfrentar el proceso desde su casa debido a su avanzada edad y agravado estado de salud, entre ellos el ex presidente Luis Echeverría, quien acusado de delitos de lesa humanidad y genocidio durante la denominada Guerra Sucia no pisó la prisión, pues tenía 78 años cuando fue llevado a juicio en 2006.
José Antonio Zorrilla Pérez, autor intelectual del asesinato del periodista Manuel Buendía ocurrido el 30 de mayo de 1984, quien obtuvo el beneficio de la prisión preventiva a sus 65 años de edad en septiembre de 2013 por parte de la entonces Juez Primera de Ejecución y Sanciones Penales del TSJDF, Belem Bolaños.
Zorrilla Pérez estuvo preso cerca de 25 años, y fue excarcelado el 10 de septiembre después de un mes de internamiento en la Torre Médica de Tepepan donde fue ingresado por un cuadro crónico de hipertensión, diabetes y problemas renales.
Otro caso emblemático fue el de Ernesto Rafael Fonseca Carrillo, Don Neto, coacusado junto con Rafael Caro Quintero de la muerte del agente de la DEA, Enrique Camarena Salazar.
Fonseca Carrillo tiene 84 años de edad, y de acuerdo con sus abogados y sufre diversos problemas de salud, por lo que también ha solicitado a través de recursos legales que sea enviado a algún reclusorio de mediana seguridad, pero no le ha sido concedida, ya que sigue siendo considerado un riesgo para la sociedad.
Cronología
Las fechas que son clave en el caso contra Elba Esther Gordillo, quien lleva 1 año 11 meses y 13 días recluida:
26-02-2013 Es detenida en el Aeropuerto de Toluca acusada del desvío de 2 mil millones 600 mil de pesos del SNTE
4-03-2013 Es trasladada de forma definitiva a la Torre Médica de Tepepan, donde es atendida de diversos males crónicos
25-04-2013 Es su primera salida a un hospital particular ante el riesgo de un infarto derivado de la isquemia miocárdica
24-09-2013 ganó un amparo para efectos donde se ordena se reponga el proceso por delincuencia organizada
6-02-2015 cumplió 70 años, por ello, puede obtener el beneficio de la prisión domiciliaria.
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