Ni Máquina, ni locomotora, simplemente una enorme muralla color azul. Los números lo dicen: 450 minutos tiene Cruz Azul sin recibir gol; cinco partidos con la cabaña en cero, con un seguro José de Jesús Corona, pero también con una línea infranqueable conformada por Fausto Pinto, Francisco Javier Rodríguez, Julio César Domínguez y Gerardo Flores, complementados por dos barredoras disfrazados de contenciones como son Gerardo Torrado y Xavier Báez. Todo un récord en arranque de torneo, aunque aún lejos de los 772 minutos que Toluca consiguió en el Apertura 2008, que se mantienen como marca de un equipo sin recibir gol.

 

Es la nueva forma de vida en Cruz Azul, un equipo infranqueable que anota con gotero. No por nada es líder del certamen de Clausura 2015, a pesar de que en el rubro de goles anotados es de los peores de la competencia con apenas tres tantos convertidos en cinco juegos disputados; un detalle sí se toma en cuenta, su efectividad en el cuadro bajo.

 

Y esa nueva forma de vida la reflejan los efectivos cementeros. Desde el entrenamiento, donde las sonrisas están a la orden, hasta los enfrentamientos con la prensa.  La muestra la pone Alemao, brasileño que llegó para La Máquina, al que se le da la carcajada fácil. No hay duda, está de buen humor, despreocupado porque caen pocos goles, pero en la tabla ellos son primeros: “Lo más importante es que estamos arriba no tenemos que desesperarnos porque las victorias están ahí; la defensa está muy bien y espero que continúe así”.

 

De momento, la racha no es obsesiva, la marca de más minutos sin recibir gol aún les queda lejos. La presume el Toluca que hizo campeón José Manuel de la Torre en el Apertura 2008. La forjó desde el minuto 64 del duelo que sus diablos jugaron ante Morelia en la fecha 12, que perdieron 3-2; hasta la vuelta de las semifinales del torneo de aquel certamen, en las que los rojos recibieron un gol de Santos en el minuto 26. Ocho partidos sin recibir gol y Cruz Azul lleva cinco.

 

Pero  ¿qué se le viene a los cementeros? Para la fecha seis, visitará a Querétaro, club que no se distingue por su potencial ofensivo, por lo que la posibilidad para sumar 90 minutos más sin recibir gol no es lejana, y la jornada siete no es muy diferente. Recibirán a Chivas en el estadio Azul, otro equipo que sufre para celebrar ante sus rivales. El problema vendría en la fecha ocho, cuando visita el infierno de Toluca, nada menos que la segunda mejor ofensiva del certamen, hasta entonces, en Cruz Azul, se vale soñar.