LONDRES. Aunque con pocas opciones de ganar un escaño, el humorista Al Murray, el artista Bob y Roberta Smith y el músico y bailarín “Bez”, de los “Happy Mondays”, son inusuales candidatos a las elecciones británicas del próximo 7 de mayo, en las que aspiran a poner en evidencia a los grandes partidos.

 

Serio y reivindicativo, Bob Smith, cuyas obras (bajo su doble nombre artístico) posee en su colección la Tate Modern de Londres, defiende “más arte en las aulas” y acusa al Partido Conservador de de David Cameron de haber “reducido la educación a puntuar bien en las listas internacionales, como la PISA” y se presenta como rival del exministro de Educación Michael Gove en la circunscripción electoral de Surrey Heath, en las acomodadas afueras de Londres.

 

Este excéntrico artista del este de Londres quiere llevar su mensaje al territorio de Gove, a quien atribuye el deterioro de la educación artística al impulsar recortes y las asignaturas clásicas en detrimento de las creativas.

 

Como Smith, el humorista Al Murray, cuyo “alter ego” es el patriótico dueño de un pub inglés, apenas puede aspirar a recuperar su depósito electoral de 500 libras (650 euros) -lo que se logra si se obtiene 5% de los votos- en la cita del 7 de mayo, cuando se enfrentará ni más ni menos que al líder del UKIP, Nigel Farage, que opta a su primer escaño.

 

Murray, que en el escenario se diría que encarna precisamente al votante tipo del populista, euroescéptico y antiinmigración Partido de la Independencia del Reino Unido (UKIP, en el condado inglés de Ken. Este personaje de cabeza rapada y barriga cervecera propone como primera medida si es elegido “nacionalizar los pubs”, tras lo cual quiere “desmilitarizar” Thanet norte y Thanet Sur.

 

Además de revalorizar la libra esterlina hasta 1,10 libras, Murray ofrece controlar la inmigración construyendo “un muro de ladrillos en el Canal de la Mancha”, por supuesto “con ladrillos británicos”, aunque, “por sentido común”, tal vez haya que emplear “a unos cuantos polacos” para la obra.

 

Propone también salir de la Unión Europea (UE) en 2025 y “del sistema solar en 2050”, al tiempo que encarcelará “a todos los desempleados”, pues es bien sabido que “el desempleo causa delincuencia”, argumenta.

 

En Salford, en el norte de Inglaterra, el Partido Laborista se enfrenta a la candidatura de Mark Berry, alias “Bez”, percusionista y bailarín del grupo “Happy Mondays”, que concurre con el partido de “Realidad”, cuya seña de identidad es su oposición a la fracturación hidráulica. Este músico presentó su campaña con el eslogan “Únete a la revolución” y acusó a los laboristas de tener políticas “iguales a las de los “tories” y a éstos de ser “títeres de los empresarios”.

 

Según las últimas encuestas, lideran en la campaña electoral los laboristas, con 34% del apoyo, seguidos por los conservadores, con 32% y el UKIP, con 15%.