A casi cinco meses de la desaparición forzada de 43 de sus estudiantes, la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa “Raúl Isidro Burgos”, del municipio de Tixtla, Guerrero, se prepara para retomar sus actividades académicas.

 

Según reportes de la prensa local, para el director José Luis Hernández Rivera, el objetivo será tratar de recuperar el semestre agosto-diciembre 2014, cuyas actividades fueron suspendidas a partir del secuestro de los estudiantes. Para conseguirlo, la dirección de la escuela había propuesto un esquema de clases en línea.

 

La semana pasada, en una entrevista con Radio Fórmula, el director Hernández Rivera señaló que lo ocurrido la noche del 26 y la madrugada del 27 de septiembre ha sido la tragedia más grande que ha pasado la escuela; sin embargo, los padres de los jóvenes desaparecidos no quieren que los compañeros de sus hijos pierdan el año escolar.

 

Sin embargo, ayer una comisión de padres de normalistas encabezada por Vidulfo Rosales, del Centro de Defensa de los Derechos Humanos de la Montaña, Tlachinollan, no acudió a una reunión con el director Hernández Rivera para formalizar la reapertura de clases en línea en la Normal de Ayotzinapa.

 

El periódico El Sur reportó en su edición en línea que tras una reunión del 5 y 6 de febrero, la Convención Nacional Popular determinó realizar una novena jornada de acción global por Ayotzinapa el próximo 26 de febrero, con una protesta nacional y nueva réplicas en los estados.

 

De manera consecutiva cada mes, también se acordaron manifestaciones en las oficinas aduanales de las fronteras del país, para demandar la presentación con vida de los normalistas que continúan en calidad de desaparecidos.

 

 

26 septiembre de 2014 se registró la desaparición de 43 normalistas en Iguala, Guerrero, quienes fueron detenidos por policías municipales y entregados presuntamente a criminales

99 detenidos van por el secuestro y la desaparición de los estudiantes, algunos de los cuales declararon que asesinaron y calcinaron a los normalistas, y cuyos restos los tiraron a un río