OAXACA. Ante la falta de respuestas del gobierno de Gabino Cué a sus peticiones, un integrante de la policía estatal se declaró en huelga de hambre.
El uniformado fue amarrado por sus compañeros a un poste del servicio del sistema de alumbrado público en el camellón central de la carretera federal 175 frente al cuartel de Seguridad Pública que se ubica en San Bartolo, Coyotepec.
Indicó que no se moverá hasta que tengan atención de las autoridades, principalmente para que no se tengan violaciones a sus derechos humanos.
Con el paso del tiempo se van a sumar más policías a las protestas, pues no quieren que el movimiento termine sin que logren avances.
El policía tomó esta determinación a diez minutos de que venciera el plazo que dió la administración estatal para que “insurrectos” como los llamó regresen a laborar.