ABUJA. El presidente de Nigeria, Goodluck Jonathan, desestimó hoy la amenaza emitida la víspera por el grupo islamista Boko Haram de sabotear las elecciones presidenciales del próximo 28 de marzo y reiteró que acabará con el grupo extremista.
En medio de los intensos bombardeos contra posiciones de Boko Haram en el norte de Nígeria, Jonathan afirmó que los comicios están garantizados y que las fuerzas armadas tiene la capacidad para defender al país del grupo armado, al que juró, “derrotar”.
“Permítanme usar esta plataforma para prometer a mis hombres y mujeres que vamos a derrotar a Boko Haram”, afirmó en una visita de trabajo a la ciudad de Lagos para inaugurar cuatro de los barcos de la Armada de Nigeria (NNS).
Jonathan afirmó que la capacidad de las fuerzas armadas ha aumentado lo suficiente para garantizar que lo comicios se realicen conforme a la fecha prevista por las autoridades electorales, según reporte de la edición electrónica del diario Vanguard.
El líder de Boko Haram, Abubakar Shekau, amenazó con sabotear las elecciones presidenciales y perpetrar ataques para evitarlas, en un video difundido la víspera a través de su cuenta en Twitter.
“Estas elecciones no se celebrarán aunque nos cueste la vida. Aunque estemos muertos, Alá nunca permitirá hacerlas”, afirmó Shekau sobre los comicios presidenciales, que estaban previstos inicialmente para el 14 de febrero pero fueron pospuestos para marzo por razones de seguridad.
El presidente de Nigeria destacó que los soldados están trabajando “maravillosamente bien” para que los comicios se realicen sin problemas, incluido en el norte del país, donde el grupo ha intensificado de manera recientes sus ataques armados y atentados suicidas.
Boko Haram, que en lengua husa significa “La educación occidental es un pecado”, ha aterrorizado el norte de Nigeria desde 2009, perpetrando un sinnúmero de ataques contra la policía, escuelas, iglesias y civiles, además de bombardear varios edificios del gobierno.
Ante la creciente violencia del grupo islamista que se ha extendido más allá de las fronteras, a Nigeria, Chad, Camerún y Níger, el Ejército nigeriano ha intensificado a lo largo de la semana sus ataques al grupo islamista, con apoyo de tropas de los tres países vecinos.