Las medidas anticorrupción anunciadas recientemente por el presidente Enrique Peña Nieto contribuyen a reforzar la confianza en México, ya que sin duda aumentarán el nivel de transparencia en la toma de decisiones gubernamentales, consideró Rolf Alter, director de Gobernanza de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).

 

En entrevista con Notimex, resaltó que las acciones anunciadas por el jefe del Ejecutivo federal son un sólido paso hacia el fortalecimiento de un pilar fundamental del sistema de lucha contra la corrupción en México.

 

Comentó que el paquete describe los principales elementos para la gestión de conflictos de interés, como un claro marco institucional con la creación de la Unidad Especializada en Ética y Prevención de Conflictos de Interés, dentro de la Secretaría de la Función Pública.

 

Además de la creación de nuevas reglas integrales que complementan los códigos de ética y la obligación de los servidores públicos federales de presentar una declaración de posibles conflictos de interés.

 

En opinión de Alter, la corrupción es un fenómeno complejo y el conflicto de interés es una pieza del rompecabezas, por lo que el coherente funcionamiento del sistema anticorrupción más amplio es esencial para complementar las medidas de prevención de conflictos de interés.

 

Por ejemplo, el mapeo de riesgos y el fortalecimiento de los mecanismos de control y de auditoría interna en la administración pública suelen aportar un valor adicional en la prevención de la corrupción y para salvaguardar la integridad del sector público.

 

Ello, podría también ahorrar escasos recursos y aumentar la eficacia de las nuevas medidas, destacó el director de Gobernanza de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

 

Refirió que si bien el paquete anunciado por el Presidente de la República ya prevé medidas prioritarias, la actualización de las normas en un código de ética y establecer el marco institucional necesario, son los primeros pasos lógicos.

 

En su opinión, la sensibilización y proporcionar orientación a los funcionarios públicos para entender y aplicar las nuevas normas también son importantes para aumentar el cumplimiento.

 

Resaltó que estas medidas están muy en línea con las directrices de la OCDE para la Gestión de Conflictos de Interés en la Administración Pública. “Nos complace que México ha modelado su paquete después de nuestras directrices”.

 

Recordó que la OCDE se ha comprometido a apoyar a México en este proceso con las buenas prácticas y las lecciones aprendidas por otros países del organismo.

 

GH