Sensores de la planta nuclear de Fukushima registraron una fuga de agua radiactiva vertida en el mar que fue detectada en el sistema de desagüe de la planta, anunció hoy la compañía operadora de la planta Tokyo Electric Power Co.
Apenas el 17 de febrero El Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) valoró “progresos significativos” en el desmantelamiento de la accidentada central de Fukushima, aunque advirtió sobre “el complejo desafío” que supone la acumulación de agua contaminada.
El OIEA pidió “considerar la opción de reanudar los vertidos controlados al mar” del líquido siempre que sus niveles contaminantes respeten los límites establecidos por ley.
Tras ser procesada, el agua radiactiva que se acumula en la central puede contener tritio, el único isótopo radiactivo que no se puede eliminar con la tecnología actual, aunque su capacidad contaminante al ser arrojada al mar es “casi insignificante”.
Casi 50 mil residentes de los municipios ubicados dentro de la “zona de exclusión” continúan evacuados casi cuatro años después de la peor catástrofe nuclear desde la de 1986 en Chernóbil, Ucrania.
Las emisiones radiactivas han afectado gravemente a la agricultura, la ganadería y la pesca local. Con información de EFE y RT