WASHINGTON. El Departamento de Justicia de Estados Unidos presentó hoy un recurso de urgencia para pedir la suspensión del fallo de un juez de Texas que impide la entrada en vigor de las medidas migratorias del presidente Barack Obama para regularizar temporalmente a unos cinco millones de indocumentados.
Brian Fallon, un portavoz del Departamento de Justicia, confirmó en su cuenta de Twitter la interposición del recurso ante una corte federal de Brownsville, Texas.
La semana pasada, el juez federal Andrew Hanen ordenó suspender temporalmente las acciones ejecutivas de Obama por una demanda que pone en duda su constitucionalidad, presentada por 26 estados, liderados por Texas.
Con el recurso presentado hoy, el Departamento de Justicia da un plazo de dos días, hasta este miércoles, al juez Hanen para que levante de forma temporal esa suspensión, mientras el Gobierno continúa con el proceso de apelación.
Según argumenta el Departamento de Justicia, Hanen no tiene la autoridad necesaria para bloquear las medidas migratorias del presidente.
Si el recurso prospera, el Gobierno podrá proceder con la implementación del plan migratorio de Obama, cuya primera fase debía haber entrado en vigor el pasado miércoles.
En el texto enviado a la corte de Brownsville, el Gobierno estima que, como mínimo, el juez debería limitar la aplicación de su fallo al estado de Texas, que es el que encabeza la demanda contra las medidas de Obama, según explicó en su rueda de prensa diaria el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest.
En caso de que el juez Hanen rechace el recurso, se prevé que el Departamento de Justicia acuda a la corte federal de apelaciones del Quinto Circuito, situada en Nueva Orleans y considerada una de las más conservadoras del país.
El pasado miércoles debía entrar en vigor la primera parte del plan ejecutivo de Obama, que consiste en la ampliación de un programa ejecutivo de 2012 conocido como Acción Diferida (DACA) y que ya ha evitado la deportación de más de medio millón de jóvenes a los que se conoce como “soñadores”.
Además de a la ampliación de DACA, el fallo del juez Hanen afecta al programa Acción Diferida para Responsabilidad de los Padres (DAPA), cuyo inicio estaba programado para mayo y que busca amparar a los padres de ciudadanos estadunidenses o con residencia permanente.
Un análisis del Instituto de Política Migratoria (MPI) cifra en 5,2 millones el número de beneficiados (3,7 millones elegibles para la DAPA y 1,2 millones para la DACA), de los que 300.000 serían nuevos candidatos tras la ampliación del programa.
Obama se mostró el pasado martes optimista al subrayar que tanto la “ley” como la “historia” están de su lado, aunque aseguró que respetará el fallo del juez Hanen, propuesto para el puesto en 2002 por el entonces presidente George W. Bush.
La gran mayoría de los estados involucrados en la demanda contra las medidas de Obama está en manos de los republicanos, que se oponen a ellas y también protagonizan un movimiento en el Congreso destinado a bloquearlas dejando sin presupuesto al Departamento de Seguridad Nacional (DHS), la agencia encargada de su aplicación.
La fecha límite para llegar a un acuerdo sobre el DHS es este viernes, 27 de febrero, ya que ese día se agotan los fondos con los que cuenta ese departamento para operar. DM
Comments are closed.