PARÍS. La canciller alemana, Angela Merkel, es descrita como un “animal político” en un reportaje de la revista Vanity Fair, según la cual la “mujer más poderosa del mundo” se siente más afín a su colega ruso, Vladímir Putin, que al estadunidense, Barack Obama.
En su número de marzo, la edición francesa de la revista describe a la jefa del Gobierno germano como una mujer fría y calculadora, cuyo único fin es mantenerse en el poder, que no tiene una visión a largo plazo y que basa todas sus decisiones en la prudencia.
“El poder”, respondió su “padre” político Helmut Kohl cuando le preguntaron qué quiere ella realmente”, según el perfil trazado por la revista.
Vanity Fair ha entrevistado a numerosas personas que han conocido a Merkel, algunos colaboradores, rivales políticos y periodistas.
Descrita como introvertida, la canciller se considera afín a Putin, con quien suele hablar en alemán, idioma que el presidente ruso domina perfectamente, o en ruso, lengua en la que Merkel ganó varios premios en su adolescencia.
Sin embargo, Merkel también cataloga a Putin como un producto salido de la KGB (servicios secretos soviéticos, para los que trabajó en Alemania) y, por tanto, desconfía de él.
Con el presidente Obama no tiene la misma cercanía porque, según la revista, se siente un poco impresionada por él y, en la primera parte de su mandato, consideraba que su discurso no se correspondía con sus acciones.
Formada en Alemania Oriental, donde se mezclan los testimonios que la consideran poco combativa contra el régimen comunista con los que aseguran que luchó como pudo, Merkel se adaptó a la vida occidental de forma rápida, tras la reunificación de las dos Alemanias hace dos décadas y media.
Considerada por sus compañeros de estudios como “una de las chicas que no se besan”, Merkel forjó un carácter en el que superar las resistencias masculinas se convirtió en uno de sus puntos fuertes.
Así pudo vencer a dos “machos” de la política alemana como Gerhardt Schroeder y Joschka Fisher, “que entre ambos totalizan siete esposas”.
El reportaje incluye numerosas fotografías, entre ellas una de su juventud en la que Merkel aparece desnuda acompañada de otras dos mujeres. DM