El presidente de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), Mario Di Constanzo, le quiso hacer un favor a su jefe y amigo el secretario de Hacienda -en la víspera del informe de éste sobre los avances de la reforma financiera- y se puso a repartir un documento donde da cuenta del incremento del financiamiento de la banca comercial a las empresas en 2014.
¿Quién habrá nombrado vocero oficial de Hacienda al señor Di ?, preguntan los analistas bisoños.
Lo peor del caso para Di Constanzo y Videgaray es que las cifras del documento que distribuyó la Condusef no coinciden con algunos informes públicos de la Asociación de Bancos de México. Dice, por ejemplo, que durante el 2014 el financiamiento de la banca comercial a las empresas ascendió a 1.44 billones de pesos, cifra que representó un incremento del 8% con respecto al año anterior. Y detalla: el crédito empresarial significó 43.1% del total de la cartera de crédito de la banca múltiple, y aunque este nivel resultó inferior en 3.4 puntos porcentuales al promedio observado entre 2009 y 2011, es pertinente mencionar que con respecto al año anterior, el flujo de financiamiento fue de 108 mil millones de pesos y el incremento en el número de créditos fue de casi 70 mil.
Por lo que se refiere a la composición de la cartera, el 75% fue dirigido a las grandes empresas, es decir, aquellas con más de 100 trabajadores y el resto correspondió a las Mipymes, donde destaca el financiamiento a la pequeña empresa por poco más de 159 mil millones de pesos, cifra que superó en 17 mil millones de pesos a la registrada un año anterior. Con respecto a los recursos canalizados a las microempresas durante el 2014 ascendieron a 131 mil millones de pesos, cifra que representó un crecimiento del 21% con respecto al 2013. Por su parte la mediana empresa tuvo una disminución en la cartera de crédito al reportar 69 mil 429 millones de pesos, lo que representa 1.66% menos con respecto al año anterior.
¡Qué bonito, qué bonito escenario presentó el señor Di Constanzo!, exclaman los perplejos.
Sin embargo, el informe de Comisiones y Comités de la Asociación Mexicana de Bancos sobre la actividad crediticia apunta, entre otras cosas, lo siguiente: Durante 2014, la banca participó en los procesos de subastas de garantía para créditos al sector de Mipymes mediante procesos en los que se segmentó dicha subasta por tamaño de empresa, permitiendo la incorporación de nuevos clientes al sistema financiero. En este sentido, se impulsó el financiamiento para el segmento de microempresas, con una derrama de 821 millones de pesos. Para pequeña y mediana empresa, se estima una derrama de créditos por 17 mil 211 millones de pesos, lo que significa a un incremento de más del 50% en relación con el año 2013. Por otra parte, mediante el esquema de garantía Pari Passu (que cubre un porcentaje de cada crédito de un portafolio) la banca obtuvo líneas para otorgar créditos al segmento Pyme, estimando generar a marzo de 2015 un portafolio cercano a 89 mil 300 millones de pesos.
En suma a través de los esquemas mencionados, se impulsó una derrama crediticia en conjunto de 107 mil 332 millones de pesos equivalente a 25 veces en promedio, respecto de los recursos aportados a garantía. (La información de la Condusef dice que fueron 159 mil millones, o sea 52 mil millones de pesos más de lo que informan los banqueros. El maquillaje pues).
¡Ay, lo que tienen qué hacer algunos funcionarios para mantener la chamba!, exclaman los observadores.
AGENDA PREVIA
Y hablando de voceros, es de esperarse que con la llegada del nuevo coordinador de Comunicación Social de la Presidencia de la República, a varios de aquellos “les den cuello”, en especial a los ineptos. ¡Nombres, nombres!, piden los morbosos. Para qué exhibirlos si todos saben quiénes son.