CARACAS. El presidente venezolano Nicolás Maduro pidió a la Asamblea Nacional una nueva ley habilitante para legislar por decreto en medio de la profunda crisis económica que atraviesa el país y el recrudecimiento de las tensiones con Washington.
El mandatario logró en noviembre de 2013, siete meses después de asumir el gobierno, una primera ley habilitante de un año de duración. Durante ese tiempo promulgó 50 decretos ley que incrementaron el control del Estado en la economía, crearon el marco de funcionamiento de algunos programas sociales y fortalecieron la normativa de combate a la corrupción.
La solicitud de poderes especiales se da en medio de un complejo escenario económico por una galopante inflación, que cerró el año pasado en 68.5%; severos problemas de abastecimiento de alimentos, medicinas y otros productos básicos y una recesión que analistas prevén se agravará por la caída del precio del petróleo.
El gobernante dijo la víspera que solicitaría la ley especial para “preservar la paz ante cualquier circunstancia” tras la decisión de Estados Unidos de congelar los bienes de siete funcionarios venezolanos en territorio estadounidense. En un acto con el que intenta bracear a contracorriente con esta decisión, Maduro nombró a uno de los sancionados como ministro del Interior, Justicia y Paz. Se trata del general Gustavo González López.
Amenaza inusual y extraordinaria
El alto mando militar se sumó a las voces de rechazo a las medidas del gobierno estadunidense y expresó a través del ministro de la Defensa, general en jefe Vladimir Padrino López, que la declaración de Washington representa una “amenaza inusual y extraordinaria”.
Por su parte, la ex congresista opositora María Corina Machado consideró “innecesaria” y “extemporánea” la nueva solicitud de ley habilitante para el presidente Maduro y planteó en una conferencia de prensa que “no es una buena señal”.
“Uno se pregunta, ¿si controlan la Asamblea Nacional y hacen con la Asamblea Nacional lo que les da la gana, qué necesidad tienen de una habilitante?”, inquirió la opositora. Al ser consultada sobre el anuncio hecho por Washington que declaró a Venezuela una amenaza, Machado indicó que “el régimen de Nicolás Maduro es una amenaza para todos los venezolanos”.
Las medidas de Washington se dan pocos días después de que Maduro aprobara una serie de acciones diplomáticas que incluyeron la reducción de los funcionarios de la embajada de Estados Unidos en Caracas y la exigencia de visa a los turistas estadunidenses.
Las nuevas tensiones entre Washington y Caracas alejan la posibilidad de normalización de las relaciones entre los gobiernos, que están sin embajador desde 2010 pero mantienen un intenso intercambio comercial a pesar de las fricciones.