PARÍS. Los socialistas franceses miran con preocupación el avance de los ultraderechistas del Frente Nacional tras haber ganado las últimas elecciones Europeas.
El primer ministro francés, Manuel Valls, dijo ante la Asamblea Nacional que la posible victoria del partido que dirige Marine Le Pen en las elecciones departamentales de este mes sería “mala para la imagen del país” y pidió “estigmatizarles”.
Ante el auge del partido al que las encuestas dan en cabeza en la primera vuelta de las departamentales con un tercio de los sufragios, Valls reiteró: “Hago campaña para estigmatizar (al FN) (…) porque considero que su victoria sería mala para la imagen de mi país, para nuestra democracia (…) No quiero que los franceses se despierten el día siguiente de las elecciones con resaca”.
Acusó a la formación de llevar en sus listas a muchos candidatos que “han hecho declaraciones antisemitas, racistas, homófobas, sexistas” y negó que sean casos aislados, como sostiene la dirección del FN.
Debaten eutanasia
En tanto, el Parlamento de Francia debatió ayer un proyecto de ley que permitirá que los pacientes paliativos puedan interrumpir su tratamiento y entrar en un “sueño profundo” hasta su muerte, una medida impulsada por el gobierno del presidente Francois Hollande que ha despertado la polémica en el país y que los críticos han definido como una eutanasia disfrazada.
De ser aprobada, la legislación daría a los pacientes paliativos una mayor capacidad para decidir sobre el tratamiento a seguir.