PARÍS. Thomas Winkelmann, portavoz de la Junta Ejecutiva de la compañía aérea alemana Germanwings, aseguró que el avión que hoy se estrelló en los Alpes franceses, un Airbus A320 con 150 personas a bordo que volaba entre Barcelona y Dusseldorf, no había tenido antes ningún incidente, que el último control importante lo pasó en el verano de 2013 y que el piloto era “experimentado” y llevaba 10 años en la compañía.
En conferencia de prensa confirmó que el lunes los técnicos habían trabajado con normalidad y no advirtieron nada extraño.
Winkelmann explicó que van a tardar en saber las nacionalidades de los pasajeros, ya que no es una información que conste en el checking del vuelo, pero que la mayoría de ellos eran alemanes y ha dado la cifra de 67, un número que podría variar.
Un equipo de Lufthansa y de Germanwings está de camino al lugar del siniestro para contribuir a la investigación.
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