La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) suspendió la actividad comercial en 13 sucursales de Sport City ubicadas en el Estado de México, Jalisco, Coahuila, Guanajuato, Morelos, Nuevo León, Puebla y el Distrito Federal, donde colocaron sellos de suspensión por violación en contratos.
A través de un comunicado, la dependencia detalló que el cierre se deriva de denuncias que consumidores interpusieron ante esta instancia. La principal reclamación es el incumplimiento en el contrato celebrado con la empresa, el cual a partir de este 1 de abril modifica la modalidad de operación sin su consentimiento y aceptación.
Otras irregularidades detectadas por personal de la institución son: no contar con un contrato de adhesión registrado ante la Profeco, utilizar un contrato diferente al registrado en Profeco, contratos con cláusulas abusivas en perjuicio de las y los consumidores, cancelación de términos y condiciones del contrato inicial, y promociones con restricciones sin especificar en qué consisten, entre otras.
La Profeco informó que suspendió la actividad comercial en las sucursales de Mundo E, Aragón, Ixtapaluca, Cuautitlán Izcalli y Metepec, en el Estado de México; dos en Guadalajara y Zapopan en Jalisco, y las de Coahuila, Guanajuato, Morelos, Nuevo León, Puebla y Distrito Federal.
Clientes podrán usar instalaciones suspendidas
Lorena Martínez, procuradora Federal del Consumidor, precisó que la instalación de sellos de suspensión comercial en las 13 sucursales del club Sport City en diferentes partes del país, no afecta a sus clientes, ya que tienen un contrato realizado y por ello podrán seguir utilizando las instalaciones y servicios.
En entrevista para Radio Fórmula, la funcionaria indicó que la suspensión de las sucursales fue la respuesta necesaria que se tuvo que hacer ante el cúmulo de denuncias recibidas desde la semana pasada, algunas de las cuales, fueron traducidas en quejas en las delegaciones.
“Lo que queda impedido es la realización de nuevas contrataciones, por tanto está suspendida toda posibilidad de seguir contratando, de seguir haciendo una relación de comercio en tanto no se subsanen las faltas que están identificadas en estas labores de verificación”, detalló.
Martínez también explicó que ya se entablaron pláticas con la empresa a efectos de buscar una conciliación con los consumidores que se han visto afectados por el cambio de condiciones en su contrato o en los servicios que venía recibiendo.
“Al decirle a un cliente que tiene un contrato, que es aprobado por nosotros, eso genera, por un lado, confianza y por otro lado, que se engaña al consumidor porque están usando un contrato distinto al que originalmente se registró ante nosotros”, explicó la procuradora. DM