Considerado uno de los “objetivos prioritarios” de la estrategia federal en Tamaulipas, José Sánchez García, presunto jefe regional del Cártel del Golfo, fue detenido por fuerzas federales tras un enfrentamiento con miembros de su célula cercana.
De acuerdo con información de las autoridades, él habría entrado a las filas de la organización por invitación de Armando Ramírez Treviño, alias El Pelón, ex líder de la organización.
A tres días de su detención, ayer el Comisionado Nacional de Seguridad, Monte Alejandro Rubido García, confirmó que se trató de una operación encabezada por policías federales y elementos de la Marina en la colonia Bugambilias del municipio de Matamoros.
De acuerdo con información del gabinete de seguridad, Sánchez García, de 47 años, tenía bajo su mando al menos siete grupos de sicarios caracterizados por su alto grado de violencia, y que actuaban principalmente en los municipios de Aldama, Soto la Marina y Abasolo.
Células al servicio de José Sánchez estarían ligados al secuestro de dos agentes de la Procuraduría General de la República (PGR), quienes fueron emboscados en Aldama el pasado 10 de enero cuando realizaban labores de investigación tendientes a lograr su captura.
En un mensaje a medios, el funcionario federal señaló que Sánchez García está relacionado con el cobro de cuotas (extorsiones) a empresarios, a ganaderos y productores agrícolas. Los montos los establecía de acuerdo con la venta y oscilaban entre 50 y 600 mil pesos.
Rubido García indicó que se le vincula con el secuestro de familiares y trabajadores de empresarios de la región, realizaba plagios en ranchos de los que se apoderaba de forma ilegal; también realizaba cobro de “derecho de piso” a comerciantes que introducían mercancía desde Estados Unidos, incluyendo aquella de contrabando. Las cuotas oscilaban entre 500 dólares o hasta 15% del valor total de la mercancía.
Asimismo, Sánchez García está relacionado con el asesinato del Delegado de Seguridad Pública y Tránsito Municipal de Aldama, registrado el 23 de agosto del año 2014, así como el de un policía federal el 11 de septiembre próximo pasado.
El titular de la CNS indicó que previo a su detención integrantes de una célula cercana al capo habrían protagonizado un choque armado con fuerzas del orden justo cuando se acercaban al punto donde se encontraba, en el cual utilizaron además de armas de grueso calibre, granadas, el cual no dejó saldo de efectivos lesionados.
Al momento de su captura, José Sánchez portaba un arma larga tipo Barret, 50, un fusil capaz de disparar municiones calibre 5.7 x 28, que puede penetrar distintos tipos de blindajes, por lo que se conocen como “matapolicías”.
En palabras del subprocurador especializado en Investigación de Delincuencia Organizada, Felipe Muñoz Vázquez, Sánchez García fue consignado por los delitos de delincuencia organizada, portación de arma de fuego de uso exclusivo del Ejército y posesión de cartuchos, ante el Juez de Distrito de Procesos Penales Federales en turno, en Matamoros, Tamaulipas, para después ser trasladado al Cefereso número 5, del Municipio de Villa Aldama, Veracruz.