La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) multó y ordenó retirar las obras e instalaciones de un proyecto de conducción de aguas residuales en el arroyo “Los Islotes”, ubicado en el municipio de Bahía de Banderas, Nayarit.

 

El organismo explicó que el proyecto “Bordo de Protección y Conducción de Tubería de Aguas Residuales, Arroyo “Los Izotes”, incumplió con las condicionantes establecidas por Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), al remover majagua de mar en un área de 704 metros cuadrados.

 

En ese sentido, además, le impuso multa por 100 mil 32.70 pesos, y la aplicación de medidas correctivas urgentes para la restauración del sitio impactado por la construcción de ese bordo, así como la remediación y reforestación de ejemplares de majagua de mar en una superficie citada.

 

En un comunicado, indicó que las sanciones se aplicaron debido a que con las obras del proyecto, se alteraron las condiciones hidrológicas del humedal, lo que ocasionó un riesgo directo sobre los mantos freáticos y el equilibrio hidrodinámico en el estero, así como los mecanismos de defensa y regeneración natural del ecosistema.

 

Especificó que al constituir el bordo una barrera, se alteró el flujo de los excedentes pluviales que desembocan en la playa, ya que no alcanzan a salir por la construcción de barreras artificiales como lo es la obstrucción generada por la construcción del proyecto.

 

Recordó que la Conagua autorizó la instalación de la tubería pata conectar la planta de tratamiento existente en la comunidad de San Francisco por estar llegando al límite de su capacidad, para ensamblarla a una nueva planta de tratamiento, la cual ya fue construida.

 

Por lo anterior, la Profepa solicitará la revocación de las autorizaciones emitidas por Semarnat y Conagua, tras encontrarse impactos que no habían sido considerados al momento de emitirse los permisos y que ocasionaron un riesgo de daño a los recursos naturales en el Arroyo Los Izotes.

 

Aunque el proyecto había aplicado medidas de mitigación, esas acciones no garantizaron el flujo del agua que se forma en el arroyo, ya que el agua estancada o anegada del brazo del arroyo, ubicado en la parte interna del bordo construido, está cubierto con lirio acuático y lenteja de agua, lo que provoca la falta de oxígeno en el agua y la mortandad de especies que ahí habitan.

 

La Profepa concluyó el procedimiento administrativo instaurado al cancelar el proyecto e imponer la multa con el objetivo de evitar situaciones de riesgo para los habitantes de la margen del arroyo y de los predios colindantes.

 

OBO