El domingo 7 de junio, los votantes del Estado de México elegirán a 125 alcaldes para el trienio 2016-2018. Más allá de la efervescencia electoral, la spotiza o la guerra sucia, es importante ubicar, desde este momento, algunos de los retos que, en conjunto y en lo individual, enfrentarán tanto la sociedad mexiquense como estos 125 nuevos gobernantes en el estado.
La importancia de los alcaldes radica en que encabezan los órganos de gobierno más cercanos al ciudadano, por ende, tienen una responsabilidad particular a la hora de atender las necesidades de la población, pero también para ser el punto de partida de la prevención, en la medida de sus posibilidades y atribuciones, de problemas que afecten a sus comunidades. En este nivel de gobierno, la corresponsabilidad políticos-ciudadanos es fundamental para una buena administración. El primer paso para una sana relación en este sentido es votar.
Ante los muchos problemas que existen en estas demarcaciones, los candidatos a alcaldes de todos los partidos prometerán a los mexiquenses las estrellas. Conforme se acerque el día de la elección, las promesas serán aún más grandilocuentes y difíciles de cumplir; caerán en la demagogia. Es aquí donde el elector deberá recordar que un buen gobierno municipal se edifica sobre las bases de la vigilancia ciudadana perenne, y ésta a su vez empieza con el sufragio. El ciudadano es responsable de votar y vigilar al gobernante, sobre todo a su alcalde, la autoridad más próxima a su cotidianidad.
Los 125 ganadores del 7 de junio gobernarán municipios como Ecatepec, el más poblado de México y, de acuerdo con el Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP), también el más violento en 2014, con 35.9 homicidios por cada 100 mil habitantes (tres veces mayor que la media nacional, 13.07). O como Nezahualcóyotl, municipio con uno de los mayores índices de contagio de VIH en el país, de acuerdo con el Instituto de Salud del Estado de México (ISEM). O Tlalnepantla que, según la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), ocupa el tercer lugar nacional en robo de vehículos. ¿Qué decir de Tlatlaya? ¿O de Chalco? Así como estos ejemplos, existen varios más en los que los municipios mexiquenses pelean los primeros lugares de listados poco honorables. Nuestro voto determinará a los individuos que afrontarán estos problemas que nos afectan directamente. Tema no menor.
En Ecatepec, por ejemplo, un candidato a alcalde que no aborde de manera clara el tema de los homicidios dolosos, es un irresponsable. El riesgo de que los candidatos no hablen de temas tan importantes como el número de ejecuciones, es que no se les orille a actuar determinadamente para con este tema en caso de que lleguen a ser gobierno. Los ecatepequenses (y el resto de los mexiquenses) merecen candidatos que traten los problemas de frente. La ciudadanía organizada tiene el poder de meter temas en la agenda pública, y si el candidato no lo hace, la gente debe hacerlo. El próximo ejecutado en Ecatepec puede ser el hijo de aquella madre que no alzó la voz en ese mitin del candidato que resultó ganador.
El voto es ese mecanismo que encauza las demandas ciudadanas a un responsable identificado: el funcionario electo. En la práctica, la centralización de la responsabilidad (que nace a partir del sufragio) sirve para canalizar, por las vías institucionales, la indignación y las demandas sociales. Votar, ergo, empodera al ciudadano frente a la autoridad que resulta electa del proceso democrático.
La competencia electoral y la grilla barata muchas veces nos distraen de los temas realmente importantes, pero no debemos quitar el dedo del renglón: votar nos conviene a todos. El Estado de México, grande, poblado y heterogéneo, es una entidad complicada de gobernar. Alcaldes que van y vienen, llevan décadas demostrando que no pueden gobernar solos de manera efectiva, que necesitan de la ciudadanía proactiva y vigilante para hacer mejor su trabajo. Cuatro preguntas para cerrar: ¿Votó hace tres años? Si así fue, ¿se informó sobre lo que los candidatos a su alcaldía proponían? ¿Va a votar en las próximas elecciones aunque el mismo día juegue la Selección Mexicana de Futbol contra Brasil? ¿Se involucró en la toma de decisiones de su ayuntamiento durante el actual trienio?
Ahora, complete la siguiente frase: “Votar sirve para _______________”.