Si la leche es poca, al niño le toca, y si abunda por una abusiva estrategia comercial de las empresas productoras, pues hay que “chillar” y seguir pegados a las ubres del gobierno para que resuelva el problemita.

 

Esta parece ser la “filosofía” de algunos industriales que primero saturaron sus inventarios en detrimento del mercado nacional, lo que afectó la comercialización de pequeños y medianos ganaderos, y después fueron con el gobierno a decirle que la industria lechera está en peligro. La historia es la siguiente:

 

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Derivado de un pico en la importación de leche por parte de la industria en el último trimestre de 2014, se elevaron los inventarios nacionales en los primeros meses de 2015, en relación al mismo periodo del año pasado, lo que, efectivamente, ha puesto en riesgo la viabilidad y la actividad productiva en esta rama del sector primario.

 

De acuerdo con datos del Grupo de Trabajo de Balanzas Disponibilidad-Consumo -integrado por las secretarías de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) y la Secretaría de Economía, así como por el Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP) y la Agencia de Servicios a la Comercialización y Desarrollo de Mercados Agropecuarios (ASERCA)-, en el último trimestre de 2014 se observó un aumento en las importaciones de leche de bovino, tendencia que se mantuvo hasta enero de 2015.

 

En octubre de 2014, se importó leche entera en polvo por el equivalente a 191 millones de litros, contra 185 del mismo mes de 2013; en noviembre, 252 millones contra 197; en diciembre 264 millones contra 212, y en enero de 2015, 189 millones contra 160 millones del mismo mes de 2014.

 

¡Nos inundamos de leche!, Exclamaron los productores nacionales.

 

La mencionada inundación se debió a que de octubre de 2013 a diciembre de 2014, los precios por tonelada de leche entera en la subasta de Nueva Zelanda cayeron 56%, por la contracción de la demanda global. Esto ocasionó, a nivel país, un sobre inventario, en detrimento de la comercialización de pequeños y medianos ganaderos nacionales.

 

La situación coyuntural del mercado de la leche fue analizada a finales del mes pasado en el seno de la Comisión Ejecutiva para la Competitividad Ganadera de la Cadena Bovinos Leche, integrada por funcionarios de la Sagarpa e integrantes del sector productivo, y encabezada por el secretario Enrique Martínez y Martínez, en su calidad de presidente de la Comisión.

 

Ahí, el titular de Agricultura les solicitó a los dueños de las empresas Lala, Alpura, Sello Rojo, Chilchota y Sigma -por mencionar algunas- su participación para ordenar el mercado.

 

Al finalizar el mes de marzo, el precio internacional para la importación de leche entera en polvo se encontraba por encima del precio de compra en el país, lo que permite prever que se desincentiven la importaciones y se privilegie la compra de leche nacional.

 

¡No hay que ser mala leche, señores!

 

AGENDA PREVIA

 

Bien haría el coordinador de comunicación social del Instituto Federal de Telecomunicaciones, IFT, en ocuparse de cumplir las funciones de su puesto, en lugar de andar tratando de defender asuntos tan indefendibles como la fallida licitación de dos cadenas de televisión, que tuvo que ser declarada desierta porque uno de los participantes -Francisco Aguirre, Grupo Radio Centro- dijo al final que siempre no.

 

Desde el momento en que el propio titular del IFT, Gabriel Oswaldo Contreras Saldívar, declaró: “Ese resultado no puede ser visto como un fracaso”, aplicó, sin querer queriendo, el calificativo exacto al penoso proceso que desnudó las fallas del Instituto: un fracaso.

 

Así que el comunicador del IFT tendría que releer el manual de funciones que corresponden a su chamba y tratar de cumplirlas, en vez de hacer berrinches inútiles porque los periodistas (no todos, claro) no decimos lo que él quiere que digamos. Dice ese documento oficial:

 

“Coordinación General de Comunicación Social. Es el área responsable de coordinar y manejar la imagen institucional mediante la ejecución de la política y estrategia de comunicación social y de relaciones públicas que determine el Instituto. Asimismo, coordina las relaciones del Instituto con la prensa escrita y los medios informativos en general y emite la información sobre el desarrollo de los programas y actividades del Instituto”.