Washington. El Banco Mundial (BM) pronosticó un crecimiento de apenas 0.8% para América Latina en 2015, el cuarto año de desaceleración consecutiva, como reflejo del “cambio permanente” en la coyuntura externa de bajos precios de materias primas y menor demanda global; mientras que para México estimó un crecimiento de 3%.
De acuerdo con la principal institución de desarrollo global, América Latina se desaceleró más que todas las demás regiones emergentes, al pasar de un 4% de crecimiento medio en 2011 a apenas 1% en 2014 y 0.8% estimado para este año.
“A falta de reformas estructurales a favor del crecimiento, esta situación apunta a una desaceleración también permanente en el crecimiento económico de la región, con tasas insuficientes para promover cualquier tipo de avance social significativo”, explicó Augusto de la Torre, economista jefe del BM.
“La evidencia apunta a que los golpes externos que emanan de la desaceleración china y los cambios en los términos de intercambio son permanentes”, aseguró en rueda de prensa en el marco de la reunión de primavera del BM y el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Sostuvo que la desaceleración económica en Latinoamérica puede ser “permanente” si no se hacen reformas estructurales para adaptar el modelo de crecimiento a un panorama externo en el que China se ralentizará y los precios de las materias primas se mantendrán en niveles bajos.
Como ejemplo, puso al gobierno mexicano, del que dijo ha puesto en práctica reformas que afectan a sectores clave como el de telecomunicaciones, el energético y el educativo y que le sitúan en una mejor posición que al resto de países de la región.
“El crecimiento de 3 % en México es sólido, pero no maravilloso. Para una economía madura como México no está mal, pero el país quiere tasas de 4 % o más”, comentó al referirse a que la economía mexicana había tenido “la mala suerte” de enfrentar la caída de los precios petroleros.
BCE mantiene los tipos de interés en su mínimo histórico
En tanto, en Frankfurt, el Banco Central Europeo (BCE) decidió, en su tercera reunión del año, conservar invariables los tipos de interés en su mínimo histórico, 0.05% y mantiene abiertas las llaves del dinero barato en Europa.
Bancos comerciales pueden hacerse de financiamiento muy barato con la medida del BCE. Las esclusas del dinero siguen abiertas en Europa. El objetivo del BCE es impulsar a los bancos a otorgar créditos.