El presidente del Senado de la República, Miguel Barbosa Huerta, aseguró que aprobar la reforma política del Distrito Federal es pagar una deuda del Congreso de la Unión con la población de la Ciudad de México.
Agregó que este cambio debe entenderse como “un logro de todos los ciudadanos de la capital del país y no sólo de una visión política”.
Puntualizó que la reforma que tendrá que definirse en el Senado en los próximos días surge como producto de una gran cantidad de propuestas de partidos, autoridades y ciudadanos. Tiene como eje la posibilidad de que el Distrito Federal cuente con su propia Constitución, precisó.
“Desde la Presidencia de la Mesa Directiva del Senado, reiteramos nuestra disposición para realizar los mayores esfuerzos para sacar adelante la reforma política del Distrito Federal, una reforma indispensable para el futuro político, social y económico de la ciudad que es de todos los mexicanos”, subrayó.
El también coordinador de la bancada del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en estas soberanía dijo que el aval a la reforma política del DF tampoco supone la permanencia de un sólo partido al frente del gobierno capitalino, sino que representa un beneficio para toda la sociedad, ya que es una demanda largamente añorada.
Señaló que a unos cuantos días de concluir el último periodo ordinario de sesiones de la LXII Legislatura, sería “un agravio” dejar sin reforma política a la ciudadanía más participativa y dinámica del país.
“Antes del 30 de abril, el Congreso de la Unión debe tener la capacidad de aprobar para la Ciudad de México una reforma de avanzada, que fije la ruta para que el Distrito Federal cuente con una Carta Magna que permita a sus habitantes ejercer plenamente sus derechos sociales, políticos y económicos”, indicó.
Barbosa Huerta mencionó que la idea de que una sola Asamblea Legislativa fuera electa para sus funciones regulares para elaborar la Constitución del Distrito Federal, por la vía de los hechos ha sido superada.
Agregó que la Constitución de la Ciudad de México debe ser elaborada por un Congreso Constituyente, electo democráticamente. “No debe ser producto de la reunión de barones de la política capitalina o nacional, sino de constituyentes electos por el voto libre y democrático”.
El legislador perredista dijo que de 1985 a la fecha, uno de los motores más importantes del cambio político y social en México ha sido la ciudadanía del DF, “hablo de los millones de mujeres y de hombres que le dan vida a la ciudad más importante de nuestro país y una de las grandes metrópolis del mundo”.
El Presidente del Senado explicó que la propuesta que se analiza en el Senado se ha construido desde una visión plural; “porque plural y diversa es la capital del país”.
Recordó que en noviembre de 2012, al inicio de la actual Legislatura, los grupos parlamentarios del Senado y el actual Jefe de Gobierno expresaron su disposición para sacar adelante esta importante reforma.
“Lamentablemente, derivado de las complicaciones del contexto nacional y de las reformas que se votaron en el Senado, ni en diciembre de 2013, ni en diciembre de 2014, la reforma del Distrito Federal pudo concretarse”, concluyó