Barcelona es la ciudad cuyo horizonte tiene la colosal obra de Gaudí: El Templo de la Sagrada Familia.
El exterior es espectacular. Todavía se encuentran grúas alrededor del templo, lo que evidencia que la construcción sigue y avanza. La Sagrada Familia tiene millones de símbolos y si no se observan con detalle, pueden pasar desapercibidos.
Vale la pena detenerse en las fachadas de este templo que finalmente serán cuatro: La del del Nacimiento, La de la Pasión, La de la Gloria y La del Ábside.