El costo de la corrupción en el sector público y para la asignación de contratos y adquisiciones del gobierno federal a empresas privadas le costó al país 100 mil 987.6 millones de pesos, de acuerdo con estimaciones del observatorio ciudadano México, ¿cómo vamos?.
México ocupa el lugar 103 de 175 en el índice de corrupción de Transparencia Internacional. En este sentido y según las estimaciones de la Secretaría de Economía sobre la inversión extranjera directa en 2014, señaló Viridiana Ríos directora de México ¿cómo vamos?, el país dejó de recibir mil 100 millones de dólares.
Ello, considerando que el Fondo Monetario Internacional (FMI) estima que un país corrupto recibe hasta 5% menos inversiones directas de capital extranjero, en comparación con una nación donde la obra y contratos públicos se asignan de manera transparente y legal.
Si a esto se le suman los 84 mil millones de pesos que la organización calculó que el año pasado dejaron de invertirse en obra pública para convertirse en “moches” o “mordidas” para conseguir contratos y obras, las pérdidas para el país llegan a los 100 mil 987 millones 629 mil 994 pesos.
En conferencia, donde cinco organizaciones civiles presentaron el “Anti-corruptómetro”, México ¿cómo vamos? reportó que la corrupción afecta a los tres principales indicadores del semáforo económico para medir la productividad de un país: inversión, productividad y crecimiento económico.
Este martes, el Senado de la República aprobó en lo general el dictamen por el que se crea el Sistema Nacional Anticorrupción, instancia encargada de la prevención, detección y sanción de hechos de corrupción, así como de la fiscalización y control de recursos públicos.
La reforma constitucional, que deberá ser aprobada por al menos 16 Congresos locales para ser efectiva, amplía las facultades de la Auditoría Superior de la Federación.