PARÍS. En Internet se encuentran efectivamente planes para fabricar bombas y los fundamentalistas islámicos intercambian informaciones en foros “online”.
Ante el auge de internautas que consultan páginas con contenido terrorista, el ministro francés del Interior, Bernard Cazeneuve, llegó a un acuerdo con las grandes compañías de internet (Google, Facebook, Microsoft, Apple y Twitter) para crear “una plataforma de buenas prácticas en la lucha contra la propaganda terrorista”.
La plataforma prevé, en primer lugar, un mecanismo para la retirada rápida de la web de los contenidos ilícitos, de acuerdo con la normativa francesa. Ello pasa por una simplificación de los procedimientos ante los operadores, y permitirá que los organismos estatales franceses con competencias en esos asuntos organicen mejor sus demandas de retirada.
Además, se reforzará la formación de policías y gendarmes para combatir los contenidos ilegales y se creará “un grupo de contacto permanente” entre el departamento del Interior y los operadores para conseguir “reactividad operativa”.
El Ministerio francés del Interior señaló que “Internet es una formidable revolución, fuente de liberación del debate público en muchos países y factor de innovación y de progreso humano”. Pero añadió que de su potencia “se aprovechan con demasiada frecuencia los partidarios del odio y de la intolerancia” y de los que apuestan por el uso de la violencia.